Los profesionales de la conducta humana Desiree Jiménez Coli y Miron Alexander Melo consideraron que el dominicano es una persona vanidosa, que le gusta exhibir sus condiciones económicas, su capacidad de compras, hacerse notar en escenarios y presumir de sus bienes y del poder político del que disfruta.
Estiman la vanidad como un conjunto de acciones que realizan las personas para diferenciarse de las demás de una manera insana.
También definen al vanidoso como un individuo afectado de trastornos de personalidad, porque se vuelve narcisista, extravagantes y se predestinados, que todo lo puede y se colocado por encima de los demás, se endiosan y engrandecen.
Como ejemplo de individuos vanidosos citaron a los políticos, a oficiales militares, dictadores, reyes y emperadores, que no solo exhiben sus extravagantes vestimentas, utensilios, joyas, gustos y riquezas, sino sus poderes.
Desiree afirma que la vanidad existe desde la creación del mundo y tanto la mujer como el hombre son personas vanidosas, pero aclaró que hay una vanidad poco dañina que se da para gratificar el ego, mediante el uso de vestimentas y accesorios para resaltar la belleza individual.
Miron Alexander al describir al vanidoso dijo que es aquella persona que se muestra como el más inteligente, el más importante y que se le debe rendir pleitesías, por lo cual caen en condiciones de trastornos de personalidad, como el narcisismo, la megalomanía y el histrionismo.
Al citar el caso de los políticos, afirmó que éstos les gusta exhibir su poder y cuando asumen cargos públicos cambian sus gestos, formas de hablar, de saludar, el trato con las demás personas que fueron de su mismo entorno de amistad, vecindad, de familia y de hábitat, además de que se convierte en una persona soberbia y arrogante.
Expresó que por ser un pueblo de gente vanidosa, el país tiene los gobernantes que se merecen quienes los eligen.
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A manera de ejemplo de vanidad, señaló que los ejecutivos de la compañía Mercedes Benz expresaron alarma por la gran cantidad de vehículos de la marca que se compraban en República Dominicana con respecto a la densidad poblacional, ya que era mayor la compra en el país que las realizadas relativamente en Alemania, que es una nación mucho más desarrollada que República Dominicana.
Desiree sostiene que el vanidoso está dispuesto a pagar un valor mayor por las cosas, a pesar de que realmente no lo valen, solo para que los demás vean que les sobra con qué pagar, sin importar el costo.
Precisó que hay gente que asiste a determinados restaurantes o negocios solo para exhibirse y que la gente note lo que consume, tipo de artículo y costo de este.
Aseveró que la vanidad se da por igual en hombres y mujeres, sean de clase baja, media o alta, aunque en el caso del hombre dijo que tiende siempre a dar mayor demostración de ostentación de riqueza y poder, por ser la dominicana una sociedad machista.
Opinó que el vanidoso, por sus excentricidades y exceso de exposición de egos, cae mal ante las demás personas.
Apuntaron que no todo vanidoso es narcisista, ya que hay varios tipos de personas con esa cualidad, pero que todo narcisista sí es vanidoso.
Consideraron que las redes sociales han venido a contribuir que esas expresiones de vanidad se propaguen mucho más, porque sirven como medio para difundir actos, consumos, roses sociales y signos de poder económico y político.
Recomendaciones
Los dos psicólogos clínicos recomendaron que las personas que se hagan un análisis introspectivo, hacia dentro de sí mismo, y comiencen a corregir sus actitudes y comportamientos y darse el valor a sí mismo y a las cosas que realmente importan y se merecen.
Desiree Jiménez Coli y Miron Alexander Melo analizaron el tema sobre la vanidad en el programa Entre Adultos, que produce el médico psiquiatra Héctor Guerrero Heredia y que conduce por la ZTV y Z101.3 FM el psicólogo clínico Eladio Hernández De la Rosa.
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