Foto: Nahirobi Peguero
En la agenda de la División de Información y Asuntos Regulatorios perteneciente a la Oficina de Gerencia y Presupuesto de la Presidencia de Estados Unidos, recientemente se publicó una propuesta de modificación a la normativa de procedimiento de ajuste de estatus migratorio. La propuesta consiste en eliminar la presentación conjunta de la petición para visa de inmigrante y la aplicación de ajuste de estatus.
Por años, la política ha sido que a inmigrantes (ej. familiares inmediatos de ciudadanos estadounidenses) que ya se encuentran en Estados Unidos, se les permita la presentación conjunta de los formularios de petición familiar o de empleo y ajuste de estatus, en ciertos casos. Sin embargo, el Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por sus siglas en inglés) y el Departamento de Inmigración y Naturalización (USCIS, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos plantean que los procesos de petición y ajustes deben llevarse a cabo por separado.
Los argumentos bajo la formulación de dicha propuesta son los siguientes: reducción en los tiempos de procesamiento para ajuste de estatus, desalentar solicitudes frívolas, asegurar que los beneficios complementarios estén vinculados a la asignación de potenciales visas, proveer recibos de formularios de ajuste de estatus estables durante el año fiscal y mejorar la calidad del inventario de data de los formularios de ajuste de estatus.
Considero que los efectos provocados por la posible implementación de la política propuesta serían contrarios a los deseados. Separar la petición de la aplicación para ajuste solo causaría más retraso en el procesamiento de ambos. Los solicitantes tendrían que esperar la decisión de uno para empezar el otro, lo que podría resultar en que algunos solicitantes de ajuste entren en estatus irregular mientras esperan la decisión de las peticiones. De igual manera, opino que la eficiencia en determinar si las solicitudes de ajuste de estatus son frívolas no mejoraría con la separación de los procesos. Considero que una inversión en la capacitación de los profesionales de las áreas: legal y de investigación del referido proceso migratorio permitiría mejores resultados.
Esta propuesta se encuentra actualmente en la fase inicial del ciclo de una política pública, por ende da suficiente oportunidad al gobierno estadounidense, defensores de inmigrantes y al público en general de investigar, evaluar y reflexionar sobre los efectos que podría causar al sistema de inmigración y los aspirantes a ajuste de estatus.
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