El doctor José Juan Castillos, jefe del servicio de nefrología del Hospital General Plaza de la Salud, informó este jueves que el 10 % de la población mundial padece de insuficiencia renal crónica.
“En el mundo, un mundo donde hay un poco más de ocho mil millones de habitantes, hay 850 millones de habitantes con insuficiencia renal crónica, el 10 % de la población tiene insuficiencia renal crónica”, manifestó.
Durante una entrevista en La Receta Médica, Castillos sostuvo que ese 10 % de población es por la definición que tiene la Organización Mundial de Salud (OMS), sobre lo que es la insuficiencia renal crónica, cuya enfermedad según dijo es todo aquello que altere la función del riñón, el sedimento urinario o que los riñones tengan un daño estructural con o sin función renal normal que dure más de tres meses.
“Es decir que si tú tienes una proteinuria que dura más de tres meses, tú tienes una insuficiencia renal crónica, si tú tienes una creatinina, aunque tengas los niveles de creatinina normal, ya tú tienes una condición que te puede, en su desarrollo en su evolución, llevarte a una insuficiencia crónica, esa que la gente conoce o que cree que es la única que existe que es cuanto te llevan a diálisis o trasplante (riñón)”, expresó.
En ese sentido, el doctor aclaró que dicha insuficiencia tiene grados que van desde uno hasta el cinco, donde el primero en términos numéricos es cuando la función renal llega a 95 mililitros por minutos, es decir que los riñones son capaces de limpias, depurar o aclarar 95 cc de sangre cada minuto, cuando normalmente los riñones limpian 125 cecee.
Mientras, que cuando se sitúa entre 94 y 60 mililitros por minutos, es decir que los riñones son capaces de depurar tóxicos entre 60 y 94 cc de sangre, es insuficiencia tipo dos.
Luego de detallar que el grado tres que se divide en A y B, el nefrólogo dijo que cuando se llega al grado cuatro, el paciente pasa a ser predialítico, en tanto que, al llegar al grado cinco, necesita ser dializado y hasta el trasplante renal.
Para que una persona se dé cuenta que está orinando poco y por lo tanto en unos de esos grados, precisó que se debe observar si tiene retención de líquidos y que se le empiecen a hinchar los tobillos y las pernas; que la orina sea espumosa.
Así como también, cuando la persona orine con sangre, porque no solo los cálculos renales producen sangrado en la orina, sino que hay muchas más que se manifiestan de la misma forma, y que no importa que no sea frecuente, dolora o indolora, como quiere debe ser estudiado.
El especialista también destacó que se debe tener en cuenta, si la persona se levanta mucho a orinar y que pese a que la presencia de piedras e infección en los riñones duele, la mayoría de las enfermedades renales no producen dolor.
José Juan Castillos recomendó a pacientes diabéticos o hipertensos visitar a un nefrólogo, ya que según reveló, siete de cada 10 pacientes que hay con diálisis en el mundo, son diabéticos, hipertensos o ambas cosas.