Imagen de archivo de una sección del Consejo de Seguridad de la ONU| Foto EFE/Eskinder Debebe
El Consejo de Seguridad de la ONU urgió este jueves a todos los países a acabar con la impunidad en los ataques contra escuelas, que han aumentado de forma importante en los últimos años, sin que la mayor parte de los responsables hayan sido llevados ante la Justicia.
En una declaración aprobada por sus quince miembros, el Consejo de Seguridad condenó la falta de rendición de cuentas en este tipo de crímenes y apremió a los Gobiernos a investigar estos episodios.
El documento fue aprobado un día después de que Naciones Unidas conmemorase por primera vez el Día Internacional para Proteger la Educación de Ataques, una fecha fijada este año por la organización para llamar la atención sobre el incremento de la violencia contra las escuelas en zonas de conflicto.
El Consejo de Seguridad reclamó a los Estados que desarrollen planes para prevenir este tipo de ataques y que sus fuerzas armadas tengan estrategias para la protección de los centros educativos, así como a garantizar apoyo a los afectados en los últimos años.
Según datos de Unicef, en 2019 se confirmaron al menos 494 ataques contra escuelas, con el occidente y centro de África, particularmente la región del Sahel, como la zona más afectada.
Las cifras, además, siguen aumentando cada año, destacó en una intervención ante el Consejo de Seguridad la directora ejecutiva de Unicef, Henrietta Fore, quien recordó que los ataques se concentran sobre todo en áreas donde muchos niños ya viven en una situación de extrema vulnerabilidad.
La argentina Virginia Gamba, representante especial de la ONU para Niños y Conflictos Armados, apuntó que los ataques contra escuelas se están convirtiendo cada vez más en una “táctica de guerra” en el Sahel, donde los centros están siendo señalados de forma específica, en especial donde hay niñas
