La espera de conocer al receptor titular que los Mets de Nueva York tendrá la próxima temporada llegó a su final tras el acuerdo por dos años y 19 millones de dólares que alcanzaron con el agente libre venezolano Wilson Ramos.
El acuerdo también pone fin al intento que hicieron los Mets de conseguir a J.T. Realmuto, de los Marlins de Miami, al considerar que Ramos es toda una garantía como receptor tras las buenas actuaciones que tuvo con los Rays de Tampa Bay y los Filis de Filadelfia.
Ramos, dos veces seleccionado al Partido de las Estrellas, la próxima temporada recibiría un salario de 8,25 millones de dólares y 9,25 millones en 2020.
Los Mets contarían con una alternativa de renovación por 10 millones, con una cláusula de rescisión de 1,5 millones.
La temporada pasada, Ramos, de 31 años, bateó para .306 con 15 cuadrangulares y un OPS de .845 que mostró la consistencia que posee con el bate.
Los directivos de los Mets ya charlaron la semana pasada con Ramos durante las reuniones de invierno en Las Vegas. Conversaron también con el cubano Yasmani Grandal, otro receptor latinoamericano que se ha declaró agente libre.
Ramos se convirtió en prioridad para los Mets, en parte por la compensación que se requería para contratar a Grandal, quien rechazó una oferta cualificada de 17,9 millones de dólares que le habían hecho los Dodgers de Los Ángeles.
Si los Mets hubieran contratado a Grandal, habrían renunciado a su segunda mayor selección en el sorteo aficionado del próximo mes de junio, y habrían tenido que entregar medio millón de dólares en recursos para contrataciones internacionales en 2019-20.
Alonso a los Medias Blancas
Un nuevo refuerzo llegó a los Medias Blancas de Chicago con el fichaje del primera base cubano Yonder Alonso por un prospecto de liga menor y ahora el próximo objetivo será el cotizado agente libre Manny Machado.
Aunque ya se conoce que los Yanquis de Nueva York mantendrán el próximo miércoles una reunión con Machado, los Medias Blancas tendrán a partir de ahora con la llegada de Alonso un factor familiar que les puede favorecer.
Se trata de que Alonso es cuñado de Machado, elemento que podría influir en la decisión final que tome el codiciado All-Star en cuanto a su futuro profesional.
Aunque los directivos de los Medias Blancas, que también se van a reunir con Machado esta semana que viene, los directivos aseguran que el fichaje de Alonso se ha hecho por las grandes aportaciones que puede hacer al equipo.
Durante una rueda de prensa telefónica, el gerente general de los Medias Blancas, Rick Hahn, señaló que el fichaje de Alonso no se trataba solamente de un asunto familiar.
"Esto fundamentalmente fue una transacción para reforzar al equipo", declaró Hahn. "Nos gusta la manera en que Yonder (Alonso) encaja en la alineación y en el clubhouse".
Hahn destacó que habían conseguido a un pelotero que les ayudaría a conseguir los objetivos deportivos que se han marcado de cara al futuro.
"También nos ayuda a acercarnos a nuestras metas para el 2019 y el futuro. No podemos tomar decisiones de adquirir a un veterano de esta clase y con ese contrato pensando en los posibles beneficios secundarios en cuanto a su relación con otros", valoró Hahn. "Su clase es muy importante para nosotros".
La pasada temporada, Alonso, de 31 años, con los Indios de Cleveland, bateó .250 con 23 cuadrangulares, 83 remolcadas, 19 dobles y OPS de .738 que fue de gran ayuda para su equipo.
Alonso jugó 138 partidos como inicialista de los Indios y dividirá su tiempo en el diamante con el también cubano José Abreu entre la primera base y bateador designado.