ESET, compañía líder en detección proactiva de amenazas, dice que los trabajadores independientes son el foco de muchos ciberdelincuentes por las debilidades en la protección de su información, sin un equipo de IT.
“Los desafíos para quienes trabajan de manera particular no son solo los limitados recursos tecnológicos. Podría decirse que el mayor impacto es el daño a la reputación del profesional autónomo y las consecuencias financieras. La recuperación en ambos escenarios es más difícil. Todo esto sin mencionar la pérdida de productividad. El tiempo que el propietario de una empresa que trabaja por cuenta propia tiene que dedicar a limpiar su infraestructura tecnológica después de sufrir un ataque, es tiempo que no puede dedicar a atender a sus clientes”, comenta Camilo Gutiérrez Amaya, jefe del Laboratorio de Investigación de ESET Latinoamérica.
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Hay pocos datos disponibles públicamente sobre el volumen de filtraciones que afectan a los trabajadores independientes. Sin embargo, es lógico pensar que con menos recursos y con poco o ningún soporte de un equipo de IT interno, se está más expuestos a las ciberamenazas, según destaca la nota de ESET.
“Un ataque de ransomware que bloquea archivos, incluido cualquier almacenamiento en la nube sincronizado. Un ataque en el que los cibercriminales roban y amenazan con filtrar archivos confidenciales y/o venderlos en la dark web, son algunos de estos ejemplos”, dice la empresa en nota de prensa.