"Actualmente existen mejores opciones para tratar este tipo de neoplasia y, en lugar de controlarla por 14 meses, le estamos ganando más tiempo, lo que además mejora la calidad de vida de las pacientes", explicó la doctora Claudia Arce Salinas desde la Ciudad de México.

La especialista, adscrita al servicio de tumores mamarios en el Instituto Nacional de Cancerología (Incan), explicó que el cáncer de mama es la primera causa de muerte por cáncer de las mujeres en México y en el mundo.

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Además, señaló, de cada 10 pacientes que se diagnostican con este tipo de enfermedad, "una presentará metástasis" que se refiere a cuando la enfermedad se disemina a otros órganos, principalmente huesos, hígado y pulmón.

El problema es que una de cada cuatro mujeres que presentan cáncer de mama metastásico mueren a causa del mismo.

De acuerdo con datos del Observatorio Global de Cáncer (Globocan), una base estadística de cáncer de la Organización Mundial de la Salud (OMS), en México tan solo en 2018 se reportaron 27.283 nuevos casos.

En México, dijo, una de las principales problemáticas es que 50 % de los casos se detectan en etapas tardías, y esto tiene varias explicaciones, entre ellas que no existen campañas de tamizaje y no se les da seguimiento.

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Además de que el diagnóstico en mujeres mexicanas es en edades más tempranas, pues mientras las guías internacionales recomiendan la primera mamografía a los 50 años, en México la mitad de las pacientes diagnosticadas son menores a esa edad.

"Es por eso que cuando llegan a hacer su primer mamografía ya tienen un problema de salud", afirmó.

Explicó que hasta hace una década, las opciones de tratamiento eran prácticamente iguales para todos los tipos de cáncer, pero ahora, el tratamiento es individualizado, lo que ayuda a que el pronóstico pueda ser mejor.

Dijo que el más común de estos cánceres es el hormonosensible, el cual es susceptible a terapia hormonal y, combinados con medicamentos como Ribociclib, dan un mayor tiempo de control de la enfermedad.

"Estos tratamientos ayudan a que la célula pierda esa capacidad de proliferación y tener un mayor control del padecimiento", afirmó.

Este tratamiento ya fue probado en el estudio clínico llamado Monaleesa-7, aplicado a 700 pacientes con un promedio de edad de 40 años, y sus resultados fueron presentados en el Congreso de la Sociedad Americana de Oncología Clínica celebrado en junio.

Esta terapia, no solo disminuye la progresión de la enfermedad, sino que mejora la sobrevida global, pues a 42 meses de seguimiento, 72 % de las pacientes están vivas.

Finalmente, la especialista explicó que estas terapias están disponibles en México a nivel privado y aunque ya están aprobadas en el sector público "todavía no las podemos preescribir por cuestiones burocráticas".