La República Dominicana mantiene este miércoles las medidas de precaución adoptadas por el paso del huracán Dorian, que pese a fortalecerse en las últimas horas, se aleja del país.
Ante el distanciamiento de Dorian, que este miércoles se convirtió en huracán, las autoridades dominicanas solo han mantenido el nivel de alerta por tormenta tropical en la franja de costa del este del país, donde se encuentra Punta Cana, principal complejo turístico del país.
Sin embargo, siguen extendiendo a toda la costa atlántica la orden de mantener los barcos en puerto, así como la prohibición de bañarse en las playas, por el peligro de que se registre fuerte oleaje.
Según los pronósticos, los efectos de Dorian -lluvias, ráfagas de viento y tormentas eléctricas-, se empezarán a sentir a partir de la madrugada del jueves en el este, noreste y localidades del sureste del país, de acuerdo con la Oficina Nacional de Meteorología (Onamet).
Este panorama se extenderá hacia otras localidades a medida que el huracán se mueva hacia el oeste y noroeste del país.
No obstante, se espera que los valores de lluvias para mañana sean inferiores a los que estaban previstos hasta este martes.
La Onamet retiró hoy la alerta de condiciones de tormenta tropical desde Samaná (noreste) hasta Puerto Plata (norte), pero mantiene alerta por condiciones de tormenta desde la isla Saona (este) hasta Samaná (noreste).
En tanto, el Centro de Operaciones de Emergencias (COE) mantiene en alerta verde (mínima) en seis provincias en el este y noreste: María Trinidad Sánchez, Samaná, San Pedro de Macorís, La Romana, Hato Mayor, Seibo, Monte Plata y La Altagracia, donde se ubica Punta Cana.
El COE se declaró hoy en sesión permanente ante la evolución del fenómeno atmosférico y mantiene las restricciones en la costa atlántica, ya que, según explicó en una rueda de prensa su director, Juan Manuel Méndez, "las condiciones del mar van a comenzar a deteriorarse".
Entre las medidas de precaución adoptadas por las autoridades locales destacan el monitoreo mientras duren las condiciones de las zonas vulnerables así como la activicación de las salas de crisis del Ministerio de Salud, el Servicio Nacional de Salud y de la Defensa Civil, mientras que el Ministerio de Defensa activó su Plan Relámpago, usualmente puesto en marcha en situaciones de emergencia.
Mientras, el Ministerio de Obras Públicas realiza labores de limpieza en las vías públicas en las provincias bajo alerta para evitar posibles inundaciones, de acuerdo con información del COE.
En sesión permanente se encuentra también la Alcaldía del Distrito Nacional, centro de Santo Domingo, cuyo titular, David Collado, dijo que la institución "se preparó para lo peor" aunque destacó que "no hay ningún tipo de amenazas" para Santo Domingo.
Según el Centro Nacional de Huracanes (NHC) de EE. UU., Dorian se convirtió este miércoles en huracán justo cuando se encuentra junto a Santo Tomás, isla principal de las Islas Vírgenes de EE. UU., y presenta vientos máximos sostenidos de 75 millas por hora (120 km/h).
El huracán de categoría 1 en la escala Saffir-Simpson (sobre un máximo de 5) se desplaza hacia el noroeste a 13 m/h (20 km/h), por lo que pasará en las próximas horas sobre la costa noreste de Puerto Rico.
En su boletín de las 18.00 GMT, los meteorólogos aseguran que datos recogidos en la isla de Santo Tomás muestran que Dorian genera ya vientos de 75 m/h (120 km/h), con ráfagas aún más fuertes.
El territorio dominicano se vio afectado en septiembre de 2017 por el potente ciclón María, que asoló a Puerto Rico.
Al menos cuatro personas fallecieron, más de 20.000 fueron desplazadas y miles quedaron sin servicio eléctrico en República Dominicana a causa de este fenómeno que, de acuerdo con los datos oficiales, dejó daños en infraestructuras por valor de unos 3.000 millones de pesos (58,8 millones de dólares a la tasa actual)