Ante la alerta causada por el avance del coronavirus, el Instituto Nacional de Protección de los Derechos del Consumidor (Pro Consumidor) ha solicitado a las farmacias del país información sobre precios y disponibilidad de mascarillas, guantes y medicamentos para enfermedades respiratorias, entre otros productos.
La titular de la institución, Anina Del Castillo, informó este martes sobre la medida, adoptada para evitar especulación en los precios de estos y otros productos, como gel antibacterias, vitamina C, antigripales y termómetros, en perjuicio de las personas y para evitar que se produzca el acaparamiento de los mismos.
Las farmacias y comercios de venta de medicamentos deberán indicar, además, los precios a los que compraron dichos productos en todas las marcas y presentaciones, desde el 15 de enero al primero de marzo de 2020, tanto en sede como en sucursales de todo el territorio nacional.
Asimismo, estos proveedores deberán aportar la razón social y domicilio de los laboratorios donde adquirieron los productos e indicar si, a la fecha, existe desabastecimiento en algunos ellos.
“Nosotros no regulamos precios en nuestro país, pero si evitaremos especulación mediante el análisis de los precios ante la alerta del coronavirus, a la vez que instamos a estos proveedores a que adopten prácticas comerciales respetuosas de los derechos e intereses de los consumidores”, declaró la funcionaria.
La solicitud de Pro Consumidor se sustenta en la Ley de Protección al Consumidor, en cuanto a la obligatoriedad de las empresas de proporcionar a las autoridades competentes informaciones y datos relevantes que sean de utilidad para el consumidor.
Del Castillo exhortó a la población a mantenerse informada sobre esta alerta y seguir estrictamente las recomendaciones del Ministerio de Salud Pública como autoridad oficial competente.
Las autoridades sanitarias han insistido en que el COVID-19, nombre oficial de la enfermedad, no circula por el país, donde el domingo se confirmó el primer caso (importado) de la enfermedad en un turista italiano de 62 años que entró a la República Dominicana el pasado 22 de febrero.
El hombre permanece ingresado desde el sábado 29 en el Hospital Militar Ramón de Lara de Santo Domingo mientras se da seguimiento intradomiciliario a 36 personas a las que las autoridades han informado de las medidas a tomar para proteger su entorno.
La expansión del COVID-19 llevó al Gobierno a suspender por 30 días los vuelos desde Milán debido al aumento de los casos de la enfermedad en Italia, donde la enfermedad ya ha causado muertes y hay más de 800 infectados.
Asimismo, se han reforzado las medidas de previsión, por lo que las aerolíneas deberán reportar a la Dirección de Epidemiología posibles casos de gripe entre sus pasajeros, así como el listado de localización de los mismos y sus tarjetas de salud.
Además, las autoridades sanitarias y las Fuerzas Armadas están preparando en la Base Naval de Santo Domingo un hospital con capacidad para 40 camas para trasladar a eventuales pacientes del coronavirus.