El secretario de Estado de EE.UU., Mike Pompeo, aseguró este jueves que la liberación de opositores presos en Venezuela por parte del Gobierno del presidente Nicolás Maduro "no resuelve, ni siquiera aborda, la crisis política subyacente".
"El anuncio del régimen de Maduro de la desestimación condicional de los cargos penales contra aproximadamente un tercio de los presos políticos que tiene no resuelve, ni siquiera aborda, la crisis política subyacente de Venezuela", dijo Pompeo en una declaración.
El Gobierno venezolano ha estado excarcelando a opositores presos desde que el lunes el presidente Nicolás Maduro otorgara medidas de gracia a 110 personas, de las cuales 50 estaban en prisión.
"Quedan cientos de presos políticos y, al igual que a los que ahora se les ofrece arresto domiciliario o poner fin (por el momento) a sus causas penales, ninguno de estos venezolanos debería haber sido encarcelado ni un solo día", recordó Pompeo en su declaración.
Hizo notar que entre los beneficiados por las medidas no había "ningún líder chavista o sindical destacado preso, ni ningún miembro del Ejército, a pesar de su número desproporcionado entre los presos políticos".
También alertó de que estas "desestimaciones de los cargos son condicionales", y que los opositores beneficiados están a expensas de que se les rescinda el beneficio si "’vuelven a cometer cualquier acto de terrorismo, violencia o golpista', según lo determine arbitrariamente el régimen".
"En Venezuela no existen condiciones para unas elecciones libres y justas y la liberación de varios presos políticos no cambia eso", aseguró Pompeo, quien agregó que "las condiciones de la democracia en Venezuela siguen siendo terribles".
"Muchos opositores políticos del régimen aún tienen prohibido postularse para cargos públicos y siguen sin derechos políticos", y la Comisión Nacional Electoral (CNE) "permanece bajo un estricto control del régimen", agregó.
"La libertad de prensa no existe. La libertad de expresión no existe. La libertad de reunión no existe. Estas condiciones mínimas para recibir una misión de observación electoral internacional creíble siguen ausentes", siguió Pompeo.
También aseguró que "el régimen mantiene una puerta giratoria de encarcelamiento e intimidación para extorsionar la participación en la farsa electoral de Maduro del 6 de diciembre", en referencia a las legislativas.
El secretario de Estado expresó su "respeto y admiración" a los opositores venezolanos, que calificó que "patriotas", por los "sacrificios que han hecho para liberar a su país".
Mencionó en concreto el caso de los líderes opositores Juan Guaidó (a quien EE.UU. reconoce como presidente legítimo), Leopoldo López y Julio Borges, que según Pompeo, "siguen amenazados, acosados y acusados por el régimen".
Tampoco podrán regresar al país la mayoría de los líderes políticos democráticos venezolanos exiliados, "porque saben que podrían ser encarcelados instantáneamente. Hay cero garantías para su seguridad", dijo.
"Instamos a todos los actores democráticos, tanto dentro como fuera de Venezuela, a continuar insistiendo en las condiciones necesarias, internacionalmente aceptadas, para unas elecciones libres y justas", concluyó Pompeo.