No estoy de acuerdo que la Liga Dominicana de Béisbol Profesional (Lidom) le dedique el próximo torneo al Dr. Leonardo Matos Berrido.
Consideramos que el Dr. Matos Berrido no tiene los méritos como ciudadano para tal distinción, partiendo del hecho de que las dedicatorias deben estar supeditadas a la trayectoria y conducta intachable de un ciudadano, más allá de sus ejecutorias e impronta en cualquier entidad que este haya pertenecido.
Al margen de que la Lidom es un negocio privado, soy de opinión de que siendo el béisbol el principal pasatiempo del dominicano, se sentaría un precedente funesto al dedicarle el torneo a alguien que, como el Dr. Leonardo Matos Berrido, tiene antecedentes que dejan mucho que desear y que no representan los mejores ideales del pueblo dominicano.
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No puedo concebir que con tantos dominicanos honorables con una intachable trayectoria de vida y laboral, sea precisamente a este personaje que se le dedique el torneo otoño-invernal, máxime en un momento donde, de manera consensuada, existe un rechazo a la violencia de género en toda la extensión de la palabra.
Como padre de dos hijas no sé cuál sería mi respuesta cuando estas me pregunten el porqué se le dedica el torneo a un ciudadano con antecedentes tan negativos.
Señores de Lidom, espero que estas puntualizaciones sirvan para reconsiderar la dedicatoria del próximo torneo al Dr. Leonardo Matos Berridos.
Tenemos grandes hombres cuyos legados trascienden generaciones, tales como Osvaldo Virgil, Manuel Mota, los hermanos Alou, Mickey Mena, Tomás Troncoso Cuesta, Cuqui Córdova, Fernandito González Tirado (póstumo), entre otros notables dominicanos con quienes nos sentimos muy orgullosos de compartir la nacionalidad.