El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, aseguró este viernes que fue él mismo, y no su gabinete, quien ordenó la liberación de Ovidio Guzmán, hijo de Joaquín "El Chapo" Guzmán, tras un operativo fallido en octubre pasado en Culiacán, en el noroccidental estado de Sinalo.
"Iban a perder la vida si no suspendíamos el operativo más de 200 personas inocentes en Culiacán, Sinaloa. Y se tomó la decisión, yo ordené que se detuviera ese operativo y que se dejara en libertad a este presunto delincuente", dijo López Obrador en conferencia matutina, en referencia a Ovidio Guzmán.
Hasta el momento, López Obrador había asegurado que, tras el fallido operativo, con la captura y posterior liberación de Ovidio Guzmán, había sido una decisión del gabinete de seguridad que él había secundado.
El 21 de octubre, días después del suceso, explicó en rueda de prensa: "Fue una decisión del gabinete de seguridad y yo la avalé. Un gobernante puede poner en riesgo su vida pero no tiene el derecho de poner en riesgo la vida de los demás".
El 17 de octubre de 2019, soldados mexicanos retuvieron a Ovidio Guzmán en un domicilio de Culiacán, lo que desató una ola de violencia en toda la ciudad, donde grupos de sicarios provocaron tiroteos e incendios, y liberaron a una cincuentena de presos de un penal.
Al verse superado por la situación, el Gobierno de México tomó la decisión de soltar al hijo de "El Chapo" bajo el argumento de que así se podía proteger la vida de los ciudadanos de Culiacán.
RELACIÓN CON ESTADOS UNIDOS
López Obrador hizo estas declaraciones tras ser preguntado por un periodista sobre el trabajo conjunto con Estados Unidos en la lucha contra el narcotráfico y la entrada de armas de fuego al país.
El mandatario mexicano aseguró que ahora ya no hay "injerencia" externa en la lucha contra la violencia, pero sí "relaciones de cooperación" con Estados Unidos.
"Hay relaciones de cooperación, pero al mismo tiempo de respeto y el ejemplo lo da, aunque parezca increíble, el que da el ejemplo es el presidente Donald Trump", apuntó.
La captura y posterior liberación de Ovidio Guzmán demostró el poder que todavía mantiene el Cártel de Sinaloa en esta parte de México pese a la caída de uno de sus líderes.
"El Chapo", quien fue considerado el mayor narcotraficante del mundo, cumple ahora sentencia de cadena perpetua en la prisión federal de máxima seguridad en Florence, estado de Colorado, en Estados Unidos.