La OPEP y sus aliados cancelarán previsiblemente la reunión que habían convocado para abril en Viena, según ha aconsejado este lunes un comité ministerial en Bakú, una decisión que dejará en vigor, al menos hasta finales de junio, el recorte de la producción conjunta acordado en diciembre pasado.
"En vista de que es improbable que los fundamentos del mercado cambien significativamente en los próximos dos meses, el Comité Ministerial Conjunto de Supervisión (JMMC, acrónimo en inglés) del acuerdo (…) recomienda cancelar la reunión ministerial de abril", señaló el panel en un comunicado.
"Sentimos que quizás la reunión en abril podría no ser necesaria. Pero el Comité no tiene la autoridad suficiente para cancelar esa reunión", dijo en Bakú el ministro saudí de Petróleo, Jalid al Falih.
No obstante, por el hecho de que los principales representantes de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) hayan estado presentes en el encuentro del JMMC, se estima muy probable que próximamente se confirme oficialmente la decisión.
Los próximos 17 y 18 de abril, los ministros del sector de los países de la llamada "OPEP+" (la organización y otros diez productores -entre ellos Rusia- con los que selló en diciembre un acuerdo para reducir los suministros y evitar así la caída de precios), se iban a reunir en Viena para decidir si extienden más allá de junio la política de recortes.
Así, el próximo encuentro ordinario se celebrará el 25 de junio, cuando "se tomará una decisión sobre el objetivo de producción para la segunda mitad de 2019″, indicó el Comité, reunido durante dos días en la capital de Azerbaiyán.
Previamente, el JMMC volverá a estudiar la situación en una reunión en mayo, en la ciudad saudí de Yeda.
Al Falih había explicado previamente que la recomendación del Comité correspondía a las expectativas de que el mercado seguirá registrando una oferta excedentaria durante la primera mitad del año.
Existe "un consenso creciente (…) de que es prematuro tomar en abril una decisión sobre la producción para la segunda mitad" del año, afirmó.
El paso dado por el Comité también da tiempo a evaluar el impacto de las sanciones estadounidenses a Irán y Venezuela en el mercado petrolero durante los próximos meses, según indicó a la agencia rusa RIA Nóvosti el ministro kuwaití de Petróleo, Jalid Al Fadel.
"Tenemos que mirar aún los datos para ver si ocurren cosas extrañas, pero por ahora la información es insuficiente", señaló.
En este contexto, Manuel Quevedo, ministro de Petróleo de Venezuela y presidente de la compañía petrolera estatal del país, PDVSA, dijo que Caracas podría redirigir el suministro de su crudo originalmente destinado a EEUU a Rusia u otros países.
En virtud del acuerdo que entró en vigor el pasado 1 de enero, la OPEP y sus aliados se comprometieron a retirar del mercado entre enero y junio de este año 1,2 millones de barriles diarios (mbd) de petróleo: 800.000 por parte de los países miembros y 400.000 de los llamados "No-OPEP".
De los 24 productores participantes, Venezuela, Irán y Libia quedaron exentos del compromiso de limitar sus extracciones debido a las caídas involuntarias que sufren sus industrias petrolíferas a raíz de diversas causas.
En la cita de Bakú quedó reflejado que el cumplimiento general del pacto "alcanzó casi el 90 % en febrero, lo que es más que el 83 % de enero", según el comunicado del comité, que añadió que "todos los países participantes aseguraron que superarán sus compromisos voluntarios de ajuste en los próximos meses".