Irán pidió este lunes a Naciones Unidas y a sus miembros una "respuesta colectiva" ante las "sanciones ilegales" de Estados Unidos, tras la entrada en vigor de la nueva tanda de castigos por parte de Washington.
"Esta conducta irresponsable de Estados Unidos requiere una respuesta colectiva de la comunidad internacional para defender el Estado de derecho, impedir que se mine la diplomacia y proteger el multilateralismo", señaló el embajador iraní ante la ONU, Gholamali Khoshroo, en una carta al secretario general, António Guterres.
La misiva, hecha pública por la delegación de Irán, defiende que Naciones Unidas y sus Estados miembros deben "resistir" ante las sanciones y hacer que EE.UU. rinda cuentas.
Khoshroo recordó que el acuerdo nuclear sellado en 2015 fue consagrado con una resolución del Consejo de Seguridad de la ONU y aseguró que las medidas impuestas por Washington "violan flagrantemente" ese documento.
El embajador iraní insistió en que se trata de "sanciones ilegales" y que van en contra de la carta fundacional de Naciones Unidas, especialmente por su aplicación extraterritorial.
Según Irán, las medidas suponen una "discriminación contra civiles en base a su país de residencia o nacionalidad" y atacan la libertad de comercio internacional.
Las nuevas sanciones estadounidenses, que entraron en vigor hoy, penalizan la venta de petróleo iraní, las transacciones financieras con su Banco Central y el sector portuario del país, en un intento de aumentar la presión económica sobre Teherán, tras la decisión del Gobierno de Donald Trump de abandonar el pacto nuclear de 2015.
Ese convenio, aprobado por la Administración de Barack Obama, comprometía a Irán, EE.UU. y otras cinco potencias (Rusia, China, Francia, el Reino Unido y Alemania), que siguen respaldándolo pese a la retirada de Washington.
La propia ONU también apoya la continuidad del acuerdo, según ha reiterado Guterres en varias ocasiones.