Una persona con trastorno dismórfico corporal (TDC) está obsesionada acerca de su apariencia e imagen corporal.
Según define Mayo Clinic, el TDC es un trastorno mental en el que una persona no puede dejar de pensar en uno o más defectos percibidos en su apariencia, un defecto que para los demás es menor o imperceptible.
Para el psicólogo Eladio Hernández, expresidente del Colegio Dominicano de Psicólogos (Codopsi), antes de que una persona sea sometida a un procedimiento de cirugía plástica estética debe ser evaluado para descartar la existencia de ese trastorno somatomorfo.
“Debe ser prohibida. Si las cirugías plásticas no son para un problema de salud, sino un problema de estética y belleza, debe ser clausurada”, señaló Hernández, al considerar que quienes se someten a ese tipo de procedimiento es porque tienen un problema psicológico.
Criticó a los cirujanos plástico por no enviar a las personas a un psiquiatra o a un psicólogo antes de realizar un procedimiento estético, sino que se quedan con el paciente por intereses económicos, afirmó.
Muertes durante procedimientos
El psiquiatra Héctor Guerrero Heredia consideró que no se puede atacar a dicha especialidad médica cuando se tienen excelentes cirujanos plásticos. Señaló que en un lugar donde se realizan muchos procedimientos estéticos, haya problemas, en algún momento.
“Porque dos o tres, o cuatro cinco, seis, siete, ocho, nueve o 10 clínicas hagan cirugía plástica a lo loco, usted no puede destruirme una industria”, expresó Guerrero Heredia.
Por otro lado, el ginecobstetra Mario Lama indicó que no es lo mismo manejar 10 que a mil pacientes. Dijo que en cualquier procedimiento que se mueva grasas, hay un riesgo de tromboembolismo.