Sidney Espinosa Morales | Foto: Kelvin de la Cruz
El gastroenterólogo Sidney Espinosa Morales afirmó este miércoles que los sobrevivientes a intoxicaciones por clerén quedan con secuelas como la polineuropatía, parkinsonismo y hasta ceguera total.
“Esos pacientes que quedan vivos quedan con secuelas, o quedan con una polineuropatía, o quedan con un parkinsonismo o quedan con una ceguera total”, manifestó al tiempo de señalar que aparte de los síntomas, con las secuelas que quedan los reducidos pacientes, se está frente a un problema real de salud.
Durante su intervención en La Receta Médica, Espinosa informó que las estadísticas mundiales hablan que la mortalidad por intoxicaciones por el alcohol llamado clerén, truculí o tapa floja anda por un 50 %, mientras que la de República Dominicana está en un 70 %, donde de 200 personas intoxicadas, 177 han muerto.
El doctor sostuvo que una de las causas de que esa tasa es alta, es porque los síntomas de intoxicación son tardíos y que pueden manifestarse a las 10, 13 y hasta 30 horas después de que la persona haya ingerido el referido alcohol.
Luego de hacer un breve recuento de la historia de cómo la realización del clerén pasó de no tener alcohol hasta cómo los fabricantes cambiaron de usar alcohol etílico por metanol debido a su economía.
Espinosa indicó que los síntomas al tomar dicha bebida clandestina son: embriaguez y picazón en la garganta.
De igual forma, destacó que otros síntomas que pueden tener la personas luego de ingerir clerén son: náuseas, vómitos, dolor en el estómago y acidez, por lo que los pacientes pueden confundirlo con una resaca, pero que con el paso de las horas el paciente comienza a sentir mareos, puede convulsionar, se le dilatan las pupilas y se le pierde el reflejo fotomotor.
“Cuando ya el paciente tiene la visión borrosa, moteado en la visión, o sea que ve puntitos, y la ceguera, ya es muy difícil revertir el cuadro, después hay convulsión y coma”, reiteró al tiempo de explicar que mucho de dichos pacientes hacen acidosis metabólica.
