El precio del petróleo intermedio de Texas (WTI) cerró este viernes con una bajada del 0,39 %, hasta los 45,53 dólares el barril, con los inversores pendientes de un posible exceso de producción y de las dudas en torno a las pruebas de la vacuna del coronavirus desarrollada por la Universidad de Oxford y la farmacéutica AstraZeneca.
Al final de las operaciones en la Bolsa Mercantil de Nueva York (Nymex), los contratos de futuros del WTI para entrega en enero perdieron 18 centavos con respecto a la sesión del miércoles, la más reciente pues el jueves se celebró en Estados Unidos el festivo de Acción de Gracias.
En una jornada de poco movimiento, el Texas retrocedió ligeramente tras las fuertes subidas recientes, que llevaron el precio del barril a su precio más alto desde marzo, justo antes del estallido de la crisis del coronavirus.
El optimismo en el mercado lo han generado sobre todo los datos positivos de efectividad de las vacunas desarrolladas por Pfizer, Moderna y AstraZeneca.
En torno a esta última, sin embargo, han surgido algunas dudas, lo que ha llevado a la Universidad de Oxford -que la desarrolla junto a la farmacéutica- a admitir que por equivocación, hubo "diferencias" en la forma de administrar las dosis a los voluntarios en los ensayos.
Oxford, en todo caso, aseguró que los métodos para medir la concentración del antídoto han quedado ya "establecidos", por lo que defiende que la efectividad de hasta un 90 % que se anunció es válida.
"Si la vacuna de AstraZeneca se ve oficialmente retrasada en la aprobación de los reguladores, esto impactará al mercado, que ha apostado en una pronta recuperación de la demanda de petróleo, con la esperanza de que el mundo pueda volver a viajar libremente antes de lo esperado", señaló en una nota el analista Bjornar Tonhaugen, de la firma Rystad Energy.
Tampoco ayudaron hoy a los precios las noticias sobre el suministro de petróleo en Libia, donde se ha reanudado el diálogo entre las partes del conflicto, en medio de que pueda haber un exceso de producción a pesar de que la OPEP y sus aliados aparentemente tienen previsto mantener los recortes que han pactado para sostener los precios del crudo.
Pese a ello, el crudo de referencia en Estados Unidos terminó la semana con una subida de más del 8 %, que llega después de otra en la que ya se había revalorizado un 5 %.
Mientras, los contratos de gasolina con vencimiento en diciembre perdieron menos de un centavo hasta 1,28 dólares el galón, y los de gas natural para entrega en enero retrocedieron casi 12 centavos, hasta 2,843 dólares por cada mil pies cúbicos.