Varias embajadas de países acreditados en Guatemala, entre los que están Estados Unidos, Alemania y Francia, exigieron ayer viernes al Gobierno que preside el exdirector de presidios Alejandro Giammattei a retomar y garantizar la lucha contra la corrupción y la impunidad.
Los países que emitieron el pronunciamiento fueron Alemania, Canadá, Estados Unidos, Francia, Reino Unido, Suecia y Suiza, además de otras naciones que componen del Grupo de Países Donantes a Guatemala (denominado G13).
En el documento, las embajadas lamentaron que la fiscal general y jefa del Ministerio Público (MP), Consuelo Porras, destituyera hace siete días al fiscal anticorrupción Juan Francisco Sandoval.
Las naciones aliadas subrayaron que la Procuraduría de los Derechos Humanos (PDH), fiscales y jueces independientes "deben gozar del más fuerte apoyo y de todas las garantías y protecciones posibles para poder llevar a cabo su trabajo de forma independiente y eficaz".
Estos esfuerzos, aseguraron, son "fundamentales en la construcción de una democracia estable y un Estado de derecho sólido que permitan atraer inversión, generar empleo, y consolidar una sociedad próspera e inclusiva en Guatemala".
El embajador de Reino Unido en Guatemala, Nick Whittingham, por su parte, llamó a un "diálogo abierto entre todos los sectores para la resolución pacífica de esta crisis", derivada de la destitución de Sandoval el pasado viernes y de un paro nacional concretado este jueves por varios sectores indígenas.
Dicho paro tuvo eco en casi todos los departamentos del país en busca de la dimisión de Giammattei y de la fiscal general, pese a la decisión de la cúpula empresarial de no sumarse a la suspensión de labores.
En relación al pronunciamiento internacional, el ombudsman guatemalteco, Jordán Rodas, esgrimió este viernes que el mensaje de la comunidad internacional "no debe tomarse a la ligera, es muy importante que el Gobierno de Guatemala escuche las preocupaciones sobre la necesidad de retomar la lucha contra la corrupción e impunidad".
DESTITUCIÓN POLÉMICA
Sandoval, de 38 años, fue removido el viernes de su cargo por Porras, quien argumentó supuestos "abusos y frecuentes atropellos" a la institucionalidad por parte del ahora exfiscal, y denunció que ella misma fue víctima de presuntos "vejámenes".
El fiscal fue el líder de la lucha anticorrupción en Guatemala durante los últimos tres años y en marzo de 2021 fue condecorado por el Departamento de Estado de EE.UU. con el galardón "Campeón Anticorrupción" junto a otras personas destacadas a nivel mundial.
Además, en una conferencia de prensa, tras ser destituido, indicó que la fiscal general, Consuelo Porras, detuvo varias investigaciones de corrupción en contra del actual Gobierno de Giammattei.
Debido al despido de Sandoval, Estados Unidos decidió suspender momentáneamente toda su colaboración con el Ministerio Público guatemalteco. Además, el Departamento de Estado de EE.UU. aseguró haber perdido la confianza en la jefa de la entidad.
Porras aseguró en medios locales durante la semana que el Ministerio Público puede subsistir sin el apoyo económico de Estados Unidos.
Según una investigación del diario La Hora, el 23 de julio, la decisión de Porras de remover a Sandoval fue influenciada por el presidente Giammattei.
El fiscal anticorrupción, al mando de la Fiscalía Especial Contra la Corrupción del Ministerio Público, imputó desde 2015 a la fecha a más de 200 personas entre ministros, diputados, funcionarios, miembros de la élite empresarial, además de presidentes y expresidentes.