El economista Nassin José Alemany favoreció los reclamos para que el Gobierno sea transparente en la metodología aplicada para establecer los precios a los combustibles cada semana, así como las exigenicas para que éstos lleguen más baratos a los consumidores.
Dijo, mediante comunicado de prensa, que se puede exigir mayor transparencia con el desglose del cálculo del Precio de Paridad de Importación (PPI) y que se reduzcan los impuestos y los márgenes, si se quiere reducir los precios por galón.
Sin embargo, opinó que la formación de precios de estos últimos meses es la misma que se ha mantenido desde hace mucho tiempo.
El profesional de la economía y asesor empresarial explicó que el precio de un galón de combustible tiene tres componentes, que son el precio de importación, los impuestos locales y los márgenes.
Respecto al precio de importación o PPI, dijo que es determinado por el Ministerio de Industria y Comercio (MIC) a través de una fórmula que contiene los costos de importación de los derivados del petróleo (incluidos el precio de importación en puerto, el flete, el seguro, los costos bancarios) y otros gastos y cargos.
Señaló que por lo general, el precio de importación se mueve estrechamente relacionado con el precio internacional del petróleo.
Precisó que la parte impositiva se compone de un impuesto específico por galón (que no depende del precio) y un impuesto ad-valorem (que sí se cobra sobre el precio).
Con relación a los márgenes, dijo que son tres, asignados al distribuidor, el transportista y el detallista.
“La suma de todos esos componentes es el resultado del precio del galón de combustible que se ajusta semanalmente, y que generalmente depende de los movimientos del mercado internacional”, indicó Alemany.
Para fines de ejemplo, manifestó que en lo que va del 2018, el precio de importación es el principal componente del costo por galón de gasolina, con un 47 %, mientras los impuestos constituyen el 36 % y los márgenes para los intervinientes un 17 %.
Ofreció un gráfico, según el cual de los últimos diez años, en el 2008 y entre el 2011 y 2014, los precios de los combustibles, medidos en dólares por galón, estaban por encima del precio actual, en tanto que los impuestos y los márgenes han tenido poco movimiento en los últimos dos años.