El capellán de la Policía Nacional, Alejandro Cabrera, mandó callar al senador de Peravia, Wilton Guerrero, en respuesta a las manifestaciones realizadas por el legislador solicitando la renuncia del director general de esa institución, mayor general Ney Aldrin Bautista.
El sacerdote calificó de "frescura" las declaraciones de Guerrero, "y sobre todo son maneras también provocativas", dijo ante la prensa tras oficiar la misa dominical en el Palacio de la Policía Nacional.
"Le pedimos al senador que permita a la Policía actuar y profundizar, y que haga silencio; que se calle, que no toque ciertas teclas que son peligrosas", dijo.
Además de conminar al legislador "a pensar antes de hablar", le instó a que, como senador, "haga su trabajo a favor del pueblo de Baní, pero a la Policía que la deje actuar y que la deje trabajar".
A raíz del asesinato en Baní del coronel de la Policía Daniel Ramos Alvarez a manos de un narcotraficante, Guerrero pidió al director general de la Policía Nacional que renuncie a su cargo, tal y como hizo el presidente de la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD), mayor general José Eugenio Matos de la Cruz, quien fue sustituido por el vicealmirante Félix Alburquerque Comprés.