La brasileña petrolera estatal Petrobras dio inicio ayer lunes al proceso de venta de entre un 50 % y un 100 % de su participación en un bloque exploratorio de crudo localizado en la Cuenca de Santos, según informó la empresa en un comunicado enviado al mercado.
Petrobras, la mayor empresa de Brasil, ha iniciado la etapa de divulgación de "oportunidades de negocios" para los interesados en la llamada concesión BM-S-51, que está ubicada en la región del polígono del presal, una enorme reserva de la que extrae crudo a precios muy bajos en aguas profundas del Atlántico.
La venta del bloque, adquirido en 2005 a través de un consorcio formado por Petrobras y Repsol Sinopec Brasil, se enmarca en el ambicioso plan de desinversiones puesto en marcha por la compañía desde 2015.
Según la petrolera, que es controlada por el Estado brasileño pero tiene acciones negociadas en las bolsas de Sao Paulo, Nueva York y Madrid, la venta "está alineada a la estrategia de optimización del portafolio (de subsidiarias ofrecidas a la venta) y a la de mejoría de distribución del capital de la compañía".
Agregó que, en los últimos años, ha optado por "concentrar" sus recursos cada vez más en la explotación en "aguas profundas y ultra-profundas", donde ha demostrado un "gran diferencial competitivo a lo largo de los años".
Petrobras es la actual operadora de la concesión y concentra un 80 % de la participación en dicho activo, mientras que Repsol Sinopec Brasil, que conforma el español Grupo Repsol, alberga los 20 % restantes.
Según la petrolera, la concesión BM-S-51 se trata de un bloque exploratorio "estratégicamente posicionado" con relación a "los descubrimientos de la Cuenca de Santos y con las áreas exploratorias del polígono del presal", ya que está situado a unos 215 kilómetros de la costa de Sao Paulo y se encuentra en una franja de lámina de agua que varía de 350 metros a 1.650 metros.
Explicó además que el negocio "está de acuerdo con las directrices" del proceso de desinversión de la empresa y obedece las disposiciones del "procedimiento especial de cesión de derechos de explotación, desarrollo y producción de petróleo, gas natural y otros hidrocarburos fluidos".
Según el presidente de Petrobras, Roberto Castello Branco, el plan de desinversiones anunciado en 2015 le permitió a la mayor empresa de Brasil recaudar un récord de 16.300 millones de dólares el año pasado.
Asimismo, gracias a la venta de los activos previstos en el plan, la inversión de Petrobras saltó desde 13.400 millones de dólares en 2018 hasta 27.400 millones de dólares en 2019, de ellos 16.700 millones de dólares en derechos para explorar y explotar áreas de interés de la empresa.
