A finales de los años 90 el Nokia 8110 representó la cumbre de la telefonía móvil y un ícono de diseño que se hizo mundialmente famoso por ser el teléfono de Neo en la película "Matrix". Ahora vuelve como parte de la política de recuperar los celulares retro de Nokia, con LTE y el juego de la Serpiente.

En "Matrix" todo comenzaba cuando un mensajero traía un sobre, dentro había un teléfono y al caer en manos de Neo empezaba a sonar. Con esta hábil acción publicitaria se hizo famoso el Nokia 8110, en su día un celular caro hecho para el mundo de los negocios con una forma curva y una tapa deslizable sobre las teclas.

La marca finlandesa revive ahora el modelo, tal como hizo con el Nokia 3310. Viene en un estridente amarillo o un negro formal. Tal como su antecesor tiene una forma curva y la tapa sobre las teclas, pero ahí se acaban las similitudes.

El diseño del relanzamiento es considerablemente más reducido, no sobresale ninguna parte ni tiene cantos ni una antena. En vez de ello es de cristal y policarbonato que parece hecho en una sola pieza, lleva una protección deslizable sobre las teclas planas y la pantalla curva LCD (240 x 320 píxeles) es el doble de grande que la del original. Tampoco tiene la misma estabilidad. El 8110 estaba construido con atención al mínimo detalle y nada vibraba. El nuevo es mucho más delicado y la tapa se mueve de lo lindo.

Al encenderlo la primera impresión es que se trata de más que una simple reedición nostálgica. Funciona con KaiOS, una variante de Linux para teléfonos móviles, lo que permite a HMD, el fabricante de Nokia, tener algunas funciones que no están en el típico celular reeditado.

Como esperan todos los fans, el 8110 tiene instalado el juego de la Serpiente, cuenta con acceso a Youtube, a la versión web de Google Maps e incluso el Google Assistant (aunque solo en inglés). También tiene un reproductor MP3, radio FM y un email muy útil, una serie de cosas que los usuarios originales de los años 90 quizás no imaginaban ni en sueños. Sobre la calidad de las fotos de la cámara de 2 megapíxeles es mejor reservarse los comentarios.

Y aunque muchos amigos curiosos intentan usar el nuevo Nokia 8110 pulsando la pantalla, aquí lo que hay es una cruceta y una serie de menús con listas o mosaicos.

Quien aún recuerde los viejos tiempos de la telefonía móvil se sentirá en casa. Salvo por las teclas demasiado planas, KaiOS es muy sencillo de usar. Para los actuales estándares resulta en cambio enervante escribir SMS con T9, y tener que poner las contraseñas del WiFi a través de las teclas.

Sí, ha leído bien: lleva conexión WiFi. El 8110 no solo tiene LTE, lo que lo hace ser muy actual y funcionar en muchas redes del mundo, sino que accede a Internet. Sin embargo, no es divertido hacerlo a través del navegador incorporado y solo funciona con las webs adaptadas a los teléfonos celulares.

Quien quiera navegar mucho es mejor que ignore el 8110. Por diez euros más, la empresa tiene el Nokia 1, un smartphone muy lento pero que cuenta con Android 8, una pantalla más grande y táctil.

Sí funciona más o menos bien la búsqueda a través de la app de Google, y hay videos que se ven muy bien, aunque diminutos y pixelados. Cuenta además con bastantes juegos, una aplicación de meteorología y una de Twitter que realmente no funciona.

El balance no es muy positivo, pero por 89 euros tampoco es muy dramático. Para hablar por teléfono y enviar SMS, el Nokia 8110 va de maravilla, la libreta de direcciones funciona bien, se pueden tener dos tarjetas SIM y usarlas en paralelo y a ello se suma una gran duración de la batería: una semana en stand-by.

En resumen: el nuevo 8110 4G no consigue revivir el espíritu de los años 90. El auténtico era en su día un producto de lujo casi indestructible. La reedición es un celular con estabilidad regular que imita al original y tiene algunas funciones interesantes. A quien le guste el diseño y quiera un celular que funcione en todo el mundo y con una batería duradera, ha encontrado una buena opción.