Venezuela inició ayer lunes una nueva reconversión monetaria sin que circularan sus nuevos billetes debido al día de asueto decretado por el presidente Nicolás Maduro, como la primera de una serie de medidas con las que intenta darle oxígeno a la agobiada economía venezolana.
Por ser día no laborable, las actividades cotidianas se redujeron abruptamente, pero ya los bancos comenzaron a reflejar los nuevos saldos en las cuentas con cinco ceros menos, después de un apagón de varias horas en la transición.
Será mañana cuando los venezolanos puedan tener acceso a los nuevos billetes del bolívar soberano, producto de suprimirle cinco ceros al bolívar fuerte, el cual tuvo vigencia de una década y que quedó pulverizado por la espiral hiperinflacionaria.
Debido a la reconversión, las cuentas bancarias de un millón de bolívares fuertes se convertirán en diez bolívares soberanos.
La medida estará acompañada por un aumento del precio de la gasolina, que es la más barata del mundo, a fin de elevarla a precios internacionales, aunque no se aplicará posiblemente hasta en septiembre, así como la liberación del mercado de divisas.
El Gobierno decretó también un drástico aumento del salario mínimo, que pasó de cinco millones a 180 millones de bolívares fuertes o 1.800 bolívares soberanos, algo que los analistas advirtieron que provocará el cierre de empresas que no puedan manejar ese gasto, aunque Maduro aseguró que asumirá la diferencia durante 90 días.
#EnVivo 📹 | ¡Estamos en Facebook Live! En reunión con el equipo económico, a pocas horas de un momento histórico para la Patria. Los invito para conversar sobre temas importantes para el país. Los espero ➡ https://t.co/m8AYOe7I9q
— Nicolás Maduro (@NicolasMaduro) 20 de agosto de 2018
La economía venezolana atraviesa una depresión, con retrocesos durante cinco años seguidos, y la inflación mantiene un ritmo de más de un 100 por ciento al mes, mientras que su principal industria, la petrolera, tiene su producción en declinación.
Maduro grabó la noche del domingo un mensaje a través de la red social Facebooklive haciendo hincapié en que el aumento del salario mínimo entrará en vigor el 1 de septiembre.
Asimismo, llamó a los venezolanos a vigilar los precios de productos de consumo masivo, que alertó que no podrán ser elevados en nuevas proporciones.
Maduro dijo que mañana se anunciará una lista de precios de los bienes de consumo con la nueva denominación monetaria, dentro de lo que los analistas alertaron que será un nuevo control de precios.
"Los empresarios del sector privado dolarizaron los precios de los productos y ya tienen sus ganancias, ahora viene la etapa de los precios justos. Quienes dolarizaron los precios no deben aumentar, no deberían ni tocarlos (los precios)", aseveró.
Maduro aseguró que con sus medidas económicas, que no cuentan con respaldo financiero de entes multilaterales, llevará la economía a una etapa de prosperidad.
"Venezuela, este lunes 20 de agosto arrancamos un gran proceso de recuperación económica, estamos viviendo días de historia, de un cambio económico definitivo y necesario", alegó.
La oposición, por su lado, advirtió que no se quedará con los brazos cruzados ante un plan económico que bautizó como el "Madurazo" y que alertó traerá más pobreza, inflación y desempleo.
Para ello llamó a la población a seguir el llamado a una huelga de un día mañana para responderle a Maduro con "un paro (huelga) de verdad", según dijo el dirigente opositor Andrés Velásquez.
"A la burla de Maduro le vamos a responder de manera inmediata con un paro de verdad, de protesta, para que el pueblo exprese su malestar”, señaló el convocante.
El llamado fue lanzado por los partidos Primero Justica, Voluntad Popular y Causa Radical, que integran la coalición Mesa de Unidad Democrática (MUD).