Por Andrea Montolivo
Steph Curry firmó este domingo la mejor actuación de siempre en el séptimo juego de una serie de 'playoffs', al aportar 50 puntos al triunfo por 120-100 de los Golden State Warriors en el campo de los Sacramento Kings con el que los campeones de la NBA avanzaron a las semifinales de la Conferencia Oeste.
Tras desperdiciar la primera 'bola de partido' en San Francisco el pasado viernes, los Warriors necesitaron una obra de arte de su estrella más brillante para acabar con unos Kings que vivieron una temporada de ensueño, en la que se clasificaron terceros en el Oeste y regresaron a la postemporada tras 17 años de espera.
Curry firmó la mejor actuación de su carrera en los 'playoffs' y llevó de la mano a los Warriors a la siguiente ronda, en la que serán rivales de Los Ángeles Lakers de LeBron James, que eliminaron a los Memphis Grizzlies.
Su marca en un séptimo partido mejoró los 48 puntos de Kevin Durant en 2021, los 47 de Dominique Wilkins en 1988 y los 47 de Sam Jones en 1963.
La leyenda de los Warriors acabó su partido con cincuenta puntos y veinte de 38 en tiros. A ellos agregó ocho rebotes y seis asistencias, en una tarde en la que el segundo mejor anotador de su equipo fue Andrew Wiggins con 17 puntos.
Veinte de los 56 puntos de los Warriors en la primera mitad llevaron la forma de Curry, que conectó ocho de sus quince tiros, con cuatro triples, y sostuvo a su equipo en el momento más complicado de Klay Thompson, que solo anotó uno de sus diez intentos desde el campo.
Game 7.
50 points.
WHO ELSE 🤯 pic.twitter.com/Y23vEDQuW4— Golden State Warriors (@warriors) April 30, 2023
En los Kings sufrió De’Aaron Fox, con solo ocho puntos y muchos fallos (3 de 8 en tiros), pero fue Sabonis en dar un paso al frente con 16 puntos valiosos para dar dos unidades de ventaja a su equipo en un choque de máximo equilibrio.
Fue en el tercer período cuando los Warriors dispararon su nivel al ritmo de un Curry estelar, protagonista desde el arco, pero también con entradas en el tráfico y canastas acrobáticas.
Una de ellas, con falta añadida, dio ventaja 67-62 a unos Warriors que siguieron pisando el acelerador y dominando en los rebotes. Apenas perdieron un balón en el tercer cuarto y Thompson dio un golpe final en la mesa con un triple, y falta incluida, que subió el 91-81 al luminoso.
Klay pasó de los siete puntos metidos en la primera mitad a firmar diez en tan solo el tercer período, con tres de cuatro en tiros. Acabó su partido con 16 puntos.
Fue un golpe psicológico para los Kings, que no pudieron aguantar el ritmo anotador de los vigentes campeones y se derritieron por completo en el cuarto período, cuando los Warriors tocaron los veinte puntos de margen en el 111-91.
Curry siguió dominando y desesperó a los Kings con un tremendo triple para el 100-83 con 7.43 minutos por jugar que acabó con las opciones de los locales.
Fue el protagonista absoluto de una tarde histórica para el baloncesto estadounidense, en un duelo en el que Kevon Looney también dio una aportación valiosa con once puntos y 21 rebotes.
En los Kings, Domantas Sabonis metió 22 puntos, con ocho rebotes y siete asistencias, mientras que Fox no pasó de los 16.