El presidente de EE.UU., Donald Trump, anunció este miércoles que ha ordenado a la Armada de su país "derribar y destruir" buques iraníes si llegan a "hostigar" embarcaciones estadounidenses en el golfo Pérsico.
"He ordenado a la Armada de EE.UU. que derribe y destruya todos y cada uno de los cañoneros iraníes si llegan a hostigar nuestros barcos en el mar", tuiteó el mandatario.
Las declaraciones de Trump se producen después de que hace una semana el Pentágono denunciara que once embarcaciones de la Guardia Revolucionaria iraní -designado como grupo terrorista por Washington- se aproximaron a buques de guerra estadounidenses en el golfo Pérsico y calificó los movimientos de "peligrosos".
En respuesta, la República Islámica insistió hace dos días en que la presencia de las tropas estadounidenses en el golfo Pérsico es "ilegal" y les urgió a abandonar "lo antes posible" esta región.
La tensión entre Teherán y Washington escaló dramáticamente en el golfo Pérsico el año pasado al registrarse en esa zona una serie de ataques y sabotajes entre mayo y septiembre contra buques militares y comerciales o instalaciones petroleras en Arabia Saudí.
Además, el secretario de Estado de EE.UU., Mike Pompeo, criticó este miércoles al lanzamiento con éxito del primer satélite militar de la República Islámica.
I have instructed the United States Navy to shoot down and destroy any and all Iranian gunboats if they harass our ships at sea.
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) April 22, 2020
"Creo que Irán debe rendir cuentas por lo que ha hecho", dijo el titular de Exteriores, que consideró que Teherán ha violado una resolución de Naciones Unidas que prohíbe el lanzamiento de misiles militares.
"Todas las naciones tienen la obligación de evaluar si el lanzamiento de Irán es congruente con las resoluciones del Consejo Nacional de Naciones Unidas", aseveró.
La Guardia Revolucionaria de Irán lanzó hoy con éxito el primer satélite castrense iraní para mejorar su capacidad defensiva.
El cuerpo militar de élite explicó en un comunicado que Nur-1 (Luz-1) fue puesto en órbita por el lanzador en dos etapas Qased (Mensajero), también de fabricación local, a una altitud de 425 kilómetros.
Estados Unidos es muy crítico con el programa espacial iraní, ya que cree que, detrás de estos intentos, la República Islámica oculta un proyecto para desarrollar misiles balísticos con capacidad para llevar ojivas nucleares y viajar a grandes distancias.
A esto se suma que Washington declaró hace un año a la Guardia Revolucionaria grupo terrorista y las fuerzas armadas de ambos países han protagonizado varios incidentes en el golfo Pérsico.
EE.UU. asesinó además en enero pasado en un bombardeo en Bagdad al poderoso general de la Guardia Revolucionaria Qasem Soleimaní, lo que provocó una grave escalada de la tensión en la región.