Si preguntara a las personas sobre su comprensión del «sueño americano», la mayoría probablemente haría referencia a la noción de lograr una movilidad social ascendente, una historia de éxito sobre sí misma o una forma de vida autosuficiente. A menudo viene a la mente la imagen por excelencia de una casa espaciosa que simboliza la estabilidad financiera y la seguridad. Además, muchos asocian esta frase con Estados Unidos como un país de oportunidades para los inmigrantes.

Según el diccionario inglés Oxford, el sueño americano es un concepto que encarna la creencia de que todas las personas que son ciudadanos de los Estados Unidos deben tener la misma oportunidad de alcanzar el éxito y la prosperidad a través de las virtudes del trabajo arduo, la determinación inquebrantable y la toma de iniciativa. Esta idea se ha arraigado en el tejido de la sociedad estadounidense durante generaciones y continúa sirviendo como fuerza impulsora para muchas personas que buscan mejorarse a sí mismas y a sus comunidades. ¿Es posible que las personas que viven en los EE. UU. logren esta búsqueda hoy en día?

Una encuesta reciente realizada por NORC (Universidad de Chicago) reveló que, si bien la mayoría de los estadounidenses aún cree en el sueño americano, las generaciones más jóvenes y las que tienen menos educación no son tan optimistas. Esto sugiere que puede haber disparidades en la forma en que varios grupos demográficos perciben y experimentan la movilidad social y las oportunidades económicas en los Estados Unidos.

De acuerdo con una encuesta hecha a 2,187 residentes de los Estados Unidos, que incluyó personas de diversos grupos de edad, razas, etnias, niveles de ingresos y educativos, un abrumador 75% de los encuestados indicó que ya ha logrado o está persiguiendo activamente el sueño americano. Este concepto, que abarca tanto la oportunidad económica como la libertad de elección, sigue siendo una aspiración importante para la gran mayoría de los estadounidenses.

Gonzalo Schwarz, director ejecutivo de Archbridge Institute, recientemente señaló que, a pesar de que la mayoría de las personas aún se aferran a la creencia en el sueño americano, existe una creciente sensación de incertidumbre, especialmente entre las personas más jóvenes y menos educadas. Esta preocupación está respaldada por resultados de encuestas recientes que indican que la mayoría de los estadounidenses creen que tienen las mismas oportunidades (32 por ciento) o mayores (48 por ciento) de lograr el éxito en comparación con sus padres. Estos hallazgos sugieren que, si bien permanece el optimismo que rodea la idea del sueño americano, existe una creciente comprensión de que lograr tal éxito puede no ser tan sencillo como lo era antes.

La visión latinoamericana del sueño americano

Las personas provenientes de naciones latinoamericanas poseen una perspectiva distintiva con respecto al sueño americano. Percibimos a los Estados Unidos como una tierra de oportunidades ilimitadas, donde uno puede expandir su crecimiento personal y explorar una amplia gama de opciones laborales. Además, el compromiso de la nación con las medidas de seguridad es admirable, lo que la convierte en un refugio para aquellos que buscan un futuro seguro. El sistema educativo también es muy apreciado, ya que brinda amplias oportunidades para que los estudiantes avancen y alcancen sus metas. Además, los estándares de vida en Estados Unidos son superiores, lo que lo convierte en un destino atractivo para quienes buscan una mejor calidad de vida.

A pesar de la actual coyuntura económica mundial que también ha impactado a Estados Unidos, es evidente que quienes optan por migrar a este país prefieren soportar las consecuencias de una recesión en una nación ya desarrollada que en una que aún está en proceso de lograr tal estatus. Es importante reconocer que para alcanzar el sueño americano, las personas deben priorizar la preparación y la planificación como precursores para lograr la movilidad ascendente.

Si bien el trabajo duro es sin duda un componente crucial, es igualmente necesario ser estratégico y sabio para alcanzar con éxito las metas más codiciadas de la vida. Como siempre, les deseo mucha suerte en su propia búsqueda del sueño americano. Un camino a esta posibilidad es la visa EB-2 por interés nacional, que puede convertirte en residente americano permanente sin necesitar patrocinadores. Más información en: [email protected].

Z Digital no se hace responsable ni se identifica con las opiniones que sus colaboradores expresan a través de los trabajos y artículos publicados. Reservados todos los derechos. Prohibida la reproducción total o parcial de cualquier información gráfica, audiovisual o escrita por cualquier medio sin que se otorguen los créditos correspondientes a Z Digital como fuente.