Exrepresentante de la Organización de los Estados Americanos en Haití, Ricardo Seitenfus | Foto: Yohan Castillo
El exrepresentante de la Organización de los Estados Americanos (OEA) en Haití, Ricardo Seitenfus, explicó cómo la Organización Mundial de Salud (OMS) se libró y no fue sancionada por el surgimiento de la epidemia del cólera en ese país, enfermedad a la que se le atribuye la muerte de más de 10 mil haitianos y casi 500 dominicanos.
El ahora escritor expuso que a su llegada al país en 2008, como parte de un grupo de coordinación internacional de que se dedicaba a estudiar cómo salir de la crisis, luego del terremoto, surgió la noticia de que en un centro de salud próximo a la frontera dominico-haitiana había una enfermedad desconocida que provocaba a las personas muerte rápida por diarrea y vomito, la cual mediante exámenes médicos, se determinó que se trataba de el cólera (vibrio cholera).
Enfermedad que aseguró “nunca había visitado Haití”, y que se propagó por los arroyos y ríos del país, matando miles de personas.
Durante una entrevista en El Gobierno de la Tarde, explicó que un médico llamado por la embajada francesa determinó que el brote del cólera fue importado al país por los miembros de la Misión de las Naciones Unidas para la Estabilización en Haití (Minustah), quienes no trataron debidamente sus desechos sólidos (residuos fecales).
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Ricardo Seitenfus expuso que sobre este hecho, que la Organización Mundial de Salud y la Organización Panamericana de Salud mintieron, tergiversaron y falsificaron documentos para no asumir responsabilidad por el brote.
“Se inventó una serie de posibles razones; se habló que este vibrio cholerae estaba bajo la tierra y cómo las placas tectónicas del terremoto lo subió, pero el terremoto fue en Puerto Principe ¿no?. Se dijo también que venía en el lastre de los navíos que aportaban; y además se dijo también que era el calentamiento global”, expresó.
El exrepresentante de la OEA indicó que no fue hasta diciembre 2016, que el ex secretario general de la Naciones Unidas, Ban Ki-moon, pronunció un discurso reconociendo la culpabilidad del surgimiento del brote, pero no se hicieron responsables del mismo.
Destacó que su libro a publicar esta semana en República Dominicana, llamado “La ONU y el cólera”, lleva al punto central de los hechos políticos, estratégicos y sobre todo jurídicos, con el propósito de responsabilizar las Naciones Unidas.
“Yo creo que la lucha de todos los que defienden las víctimas, pero también el derecho internacional y lo derechos humanos, está en este punto ahora. La responsabilidad objetiva de las Naciones Unidas con los hechos que hace por omisión y por acción”, manifestó el autor.
