Santiago de Chile se encuentra hoy bajo la novena preemergencia ambiental decretada por la Intendencia (gobernación) regional en lo que va de este año, debido a la mala calidad del aire provocada por la condiciones de ventilación de la zona, según dijeron las autoridades.
La medida se adoptó pese a que este lunes es un día "sandwich" (puente), pues este martes será festivo en Chile por la celebración religiosa de la Virgen del Carmen y se calcula que cerca de un millón de santiaguinos están fuera de la ciudad, pues además los escolares se encuentran en vacaciones de invierno.
Según las autoridades, unos 470.000 vehículos salieron de la capital chilena, de poco más de 7 millones de habitantes, por el fin de semana largo.
En ese contexto, la Intendencia decretó la restricción de circular para un 60 % de los vehículos no catalíticos, cuyas patentes terminen en 1, 2, 3, 8, 9 y 0, y para un 20 % de catalíticos de modelos anteriores al 2012, cuyas placas terminen en 4 y 5.
Las restricciones se extenderán entre las 07.30 y 21.00 horas locales (11.30 y 01.00 GMT del martes) salvo los de carga, cuyo horario de restricción rige entre las 10.00 y las 18.00 horas locales (14.00 y 22.00 GMT de hoy).
Las medidas incluyen además la paralización de más de 300 fuentes fijas contaminantes, la intensificación de la fiscalización y programa de lavado y aspirado de calles y las prohibición del uso de calefactores a leña o carbón.
Santiago amaneció este lunes con 0 grados de temperatura y se espera una máxima de 18, según la Dirección de Meteorología de Chile.
La preemergencia incluye además la prohibición de quemas agrícolas en toda la región metropolitana y la recomendación de abstenerse de actividades físicas al aire libre.
Santiago de Chile está enclavada en un valle rodeado de montañas, por lo que en los meses de otoño e invierno la calidad del aire suele empeorar debido a la ausencia de brisas que diseminen las partículas nocivas, así como por el fenómeno de la inversión térmica.
Esta última consiste en que la temperatura en la superficie es menor que en altura, por lo que las partículas nocivas se mantienen a nivel del suelo.
La contaminación aumenta la ya alta prevalencia de enfermedades respiratorias en esta época del año, en especial entre niños y adultos mayores, que cada año se cobran cerca de 4.000 fallecimientos en el país, mientras en lo que va de 2019 se contabiliza una treintena de fallecidos por influenza.
En las primeras horas de este lunes, dos de las estaciones de vigilancia distribuidas en la ciudad, correspondientes a los sectores de Cerro Navia y Pudahuel, al oeste de la urbe, anotaban un nivel de alerta de entre 200 y 300 microgramos de partículas nocivas por metro cúbico de aire.
Otras siete estaciones marcaban un nivel regular, de entre 100 y 200 microgramos, mientras dos, situadas en el área oriente, anotaban un nivel bueno, inferior a 100 microgramos de partículas nocivas.