El regulador ruso de las comunicaciones, Roskomnadzor, multó con 700.000 rublos (unos 10.000 euros) a Google por negarse a filtrar en sus búsquedas la totalidad de los sitios prohibidos en Rusia.
La entidad señaló que pese a las reiteradas advertencias, Google se negó a cumplir con las leyes rusas, que obligan a los buscadores a filtrar los resultados de todas las páginas vetadas.
Los servicios de búsqueda deben conectarse al sistema federal estatal informático que contiene el listado de estos sitios para posteriormente excluirlos.
Roscomnadzor estableció durante una revisión que más de un tercio de los enlaces incluidos en el registro de páginas prohibidas es asequible en el sistema de búsqueda de Google.
Se trata de la segunda multa impuesta a la multinacional estadounidense en Rusia por su negativa a filtrar los resultados de sus búsquedas.
El 26 de noviembre del año pasado Roskomnadzor abrió una causa administrativa por la negativa de Google a conectarse al registro de sitios prohibido en Rusia y el 11 de diciembre multó a la compañía con 500.000 rublos (unos 7.000 euros).
Después de esto Google retiró de sus búsquedas más del 70 % de los enlaces incluidos en la lista negra rusa.
Posteriormente Roscomnadzor constató que Google había incrementado en un 80 % el filtrado de los sitios prohibidos, pero ya en junio de este año constató que el porcentaje se redujo al 67,5 %, por lo que la entidad decidió imponer una nueva multa.
La ley rusa que obliga a los buscadores a filtrar el listado de sitios vetados entró en vigor el 26 de septiembre de 2018.