El director del Servicio de Ciudadanía e Inmigración de EE.UU. (USCIS, en inglés), Lee Francis Cissna, ha presentado su renuncia y dejará el puesto el 1 de junio, en un momento en el que el presidente Donald Trump ha endurecido su política migratoria, informó este martes a Efe un portavoz de esa agencia.
La fuente indicó que Cissna ya ha presentado su renuncia y el 1 de junio abandonará USCIS, que con 240.000 empleados se dedica a regular el sistema de migración legal a EE.UU. mediante la concesión de visados, asilo y también de la ciudadanía estadounidense.
Esa fuente rechazó confirmar si el sucesor de Cissna podría ser el ultraconservador Ken Cuccinelli, fiscal general del estado de Virginia entre 2010 y 2014 y que se ha enfrentado al aparato del Partido Republicano.
El viernes, el diario The Washington Post señaló que Trump sopesaba designar a Cuccinelli como director de USCIS.
Concretamente, en 2014, Cuccinelli alentó una ola de candidatos conservadores en las primarias republicanas para desafiar el poder del aparato, lo que le ha costeado la enemistad del líder de la mayoría republicana del Senado, Mitch McConnell, y de otros legisladores.
Ante la posibilidad de que Cuccinelli se convierta en jefe de USCIS, el sindicato mayoritario de trabajadores de la agencia ha arremetido contra Trump y le ha acusado de querer "destruir" la agencia.
Cissna no ha explicado por qué ha decidido renunciar al cargo y, en una carta dirigida a sus empleados y a la que accedió Efe, se limitó a felicitarles por haber establecido "con cuidado" las bases para "reformas legales muy necesarias que vendrán en un futuro próximo".
El director del USCIS es la última víctima de la purga de los últimos meses dentro del Departamento de Seguridad Nacional, encargado de la política migratoria, y que llevó a la renuncia de su titular, Kirstjen Nielsen, a quien Trump reclamó mayor dureza a la hora de combatir la inmigración irregular.
A mediados de este mes, Trump presentó un plan de reforma del sistema legal de inmigración en el que lleva meses trabajando su yerno, Jared Kushner.
El plan busca cambiar el actual sistema migratorio, basado en la reagrupación familiar, para basarlo en el mérito y admitir en EE.UU. a más trabajadores cualificados y menos familias.
La propuesta mantendría intacto el número de permisos de residencia permanente que EE.UU. concede al año, pero cambiaría el perfil de los destinatarios del 1,1 millón de "tarjetas verdes".