Los rellenos faciales en el mundo de la estética llegaron para quedarse. Estos son biomateriales que se introducen con agujas en la piel para dar volumen en las zonas corporales.

De acuerdo con la experta en medicina estética Marlene Alvarado, los rellenos se clasifican en permanentes y semipermanentes, y tienen una duración de dos meses a dos años.

Dijo que se utilizan porque hay factores externos como internos que causan envejecimiento de la piel. El principal factor externo es la radiación ultravioleta, mientras que los intrínsecos están los desgastes musculares, óseas, entre otros.

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Alvarado indicó que los rellenos se pueden aplicar en la dermis, en la subdermis y sobre hueso. Informó que uno de los rellenos de gran reconocimiento es el ácido poliláctico o sculptra.

«Da un estímulo de nueva producción de colágeno, crea una fibrosis dentro, produciendo un nuevo tejido de reparación», explicó durante su intervención en La Receta Médica.

Este relleno se puede colocar en la capa subdérmica de la piel, en la cara, en las líneas surcos nasogenianos, pero no alrededor de los labios. El ácido poliláctico tiene una duración de unos dos años.

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Por otro lado, Romy Campos destacó que la ácido poliáctico hace una voluminización diferente al del ácido hialurónico de relleno. Añadió que sculptra mejora la turgencia y la calidad de la piel por ser un bioestimulador.

Campos señaló que el uso del ácido poliláctico dependerá de la calidad de la piel del paciente.

“Te da un efecto de llenado, pero a lo que este se va degradando te va estimulando la producción de colágeno y elastina, por eso es un bioestimulador”, dijo.