Vladímir Putin | Foto: Efe/Alexei Nikolsky/Sputnik /Kremlin pool
El presidente ruso, Vladímir Putin, defendió hoy unas "relaciones normales" con Estados Unidos al recibir las cartas credenciales del nuevo embajador de ese país, John Sullivan, durante una ceremonia oficial en el Kremlin.
"Para nosotros es muy evidente que el regreso a unas relaciones bilaterales normales y constructivas está en el interés no sólo de Rusia y de EE. UU., sino de todo el mundo", dijo Putin en una intervención retransmitida en directo por la televisión.
Putin subrayó que del estado de las relaciones entre Moscú y Washington "depende en gran medida la paz y la seguridad en el planeta".
Rusia "está dispuesta a entablar un diálogo sustancioso con la parte estadounidense, incluido en el terreno del control de armamento, estabilidad estratégica y asuntos relativos a la lucha contra el terrorismo y el arreglo pacífico de las crisis regionales", señaló.
El líder ruso se mostró "convencido" de que la cooperación entre ambas potencias deben cimentarse en "la igualdad, el respeto de la soberanía y la no injerencia en los asuntos internos".
Sullivan, de 60 años y secretario de Estado interino entre marzo y abril de 2018, sustituye a John Huntsman, que dejó la legación diplomática en octubre del pasado año.
Como subsecretario de Estado de EE. UU. (2017-2019), encabezó el grupo que discutía con Moscú temas de "seguridad estratégica y lucha contra el terrorismo".
Al recibir las cartas credenciales de otros embajadores, Putin también alertó de que el mundo se encuentra ante un peligroso cruce de caminos debido al agravamiento de los conflictos regionales, la creciente amenaza del terrorismo y la destrucción del sistema de control sobre el armamento.
Por ello, adelantó que Rusia continuará defendiendo el acuerdo nuclear entre Irán y las grandes potencias que fue abandonado por la Casa Blanca.
"Consideramos ese acuerdo internacional de una importancia crítica para la estabilidad global y regional", recalcó, al tiempo que manifestó al nuevo embajador iraní la intención de Moscú de reforzar la cooperación en la lucha contra el terrorismo internacional y en favor del arreglo en Siria.
También se mostró dispuesto a mejorar las relaciones con el Reino Unido, aduciendo que su nivel actual "difícilmente" puede satisfacer a ambas partes.
