El gobernador de Puerto Rico, Pedro Pierluisi, anunció este lunes una orden ejecutiva que permitirá el inicio de las clases presenciales en la isla en marzo tras un año de interrupción por la pandemia del coronavirus SARS-CoV-2, proceso que será gradual, siempre y cuando las escuelas cumplan con los protocolos sanitarios.
La orden ejecutiva 2021-017 establece que desde el próximo 1 de marzo se permitirá la reapertura gradual y parcial de las escuelas del sistema público y privado de Puerto Rico sujeto a que cumplan con los protocolos establecidos y publicados por el Departamento de Salud.
"Será un proceso gradual", señaló Pierlusi en conferencia de prensa virtual para disipar temores, tras asegurar que era necesario porque hay cientos de miles de familias sin acceso a internet, lo que provoca que muchos estudiantes se hayan visto durante un año privados de recibir formación.
"Me he fijado en lo que se ha hecho en Estados Unidos y Europa y las clases, aunque de forma limitada, han continuado", subrayó Pierluisi, que aclaró que en gran parte de los territorios en los que las clases han continuado la incidencia del coronavirus era más baja que en la isla caribeña.
Pierluisi dejó claro que la orden ejecutiva lo que hace es permitir la vuelta de las clases presenciales, lo que no quiere decir que a partir del próximo 1 de marzo todos los estudiantes vuelven a la aulas de forma masiva.
Matizó que la secretaria designada de Educación, Elba Aponte, es la que el próximo jueves dará más detalles sobre qué escuelas abrirán sus puertas en las próximas semanas, después de afirmar que no tiene información sobre cuáles instalaciones abrirán sus puertas ni cuándo.
Mantuvo que, como ya se ha destacado, hay un total de 172 escuelas repartidas por toda la isla que no presentan ningún problema para abrir sus instalaciones -buena parte de las del sur de la isla se vieron dañadas por los terremotos del enero de 2020- y que esa es la base sobre la que se trabajará.
"Si no, nuestros niños se van a quedar atrás", indicó el gobernador, después de asegurar que la decisión de que los estudiantes vuelvan a los salones es de los padres, pero que desde el Ejecutivo se recomienda la educación presencial.
Pierluisi insistió en que no debe haber ningún problema, ya que los planteles que abran sus puertas serán inspeccionados por el Departamento de Salud antes de recibir el correspondiente permiso de apertura.