Los psicólogos clínicos y sexólogos Martha Arredondo Soriano y Antonio Ruiz exhortaron a jóvenes y adultos que para establecer una relación de pareja duradera y evitar los fracasos, hagan previamente un tiempo adecuado de noviazgo, de manera que se conozcan, identifiquen afinidades que los atraigan y definan los objetivos que los unen.
Consideraron que las parejas que permanecen por años, son las que desde un principio tuvieron cosas en común, por lo cual son felices y envejecen juntos.
Expresaron que para el matrimonio las personas no solo deben tomar en cuenta los atractivos físicos y el interés particular y obsesivo del enamoramiento hacia el ser que consideran ideal para sus sentimientos y formación de familia, sino el tipo de persona, la relación que tienen de familia, su concepto sobre la vida y su comportamiento social.
Martha y Antonio Ruiz trataron el tema “Dichoso para enamorarse y difícil para que lo quieran” en el programa Entre Adultos que por ZTV en YouTube y la Z101.3 FM produce el médico y psiquiatra Héctor Guerrero Heredia.
Refirieron que desde la escuela y la adolescencia los sentimientos se enfocan hacia una persona y se produce un enamoramiento particular, pero muchas veces ese alguien no lo sabe ni nunca se le ha comunicado, es decir, hay se siente una atracción obsesiva que no es correspondida por desconocimiento o por falta de interés.
Observaron que muchas veces el hombre o la mujer se casan o inician una relación de pareja sin hacer un noviazgo largo y luego en el hogar surgen los problemas y los cuestionamientos sobre el comportamiento de uno o el otro.
Otro problema, afirmaron los profesionales de la conducta humana, es que a veces dos personas se juntan con una idea de pareja que no cuaja cuando comparten en el hogar.
Explicaron que otra falsa concepción es creer que una pareja cambiaría sus comportamientos y forma de ser cuando comiencen a compartir en el hogar.
Estiman inapropiado, además, que el hombre o la mujer se enamoren con el solo interés de lograr una mejoría económica y disfrutes de vida, o creer que por parirle un hijo al hombre lo “amarraría” y lo tendría arrodillado ante sí.
Ocurre que muchas veces los novios comparten más entre grupos y entre familiares que entre ellos mismos juntos, y no llegan a conocerse profundamente, por lo cual fracasan en la relación de pareja luego de casados.
A quienes se enamoran por sí solos, Antonio Ruiz recomienda expresar sus sentimientos, comunica que se está enamorado y que siente atracción.
Cuando ocurre el rechazo con un no, Martha sugiere que lo mejor es cortar la relación cuando no hay correspondencia en el amor, pero hacer el retiro con diplomacia para no afectar a la otra persona.
Coincidieron en sus observaciones de que el amor no puede lograr a la fuerza, de manera obligada, y hacer caso al no decisivo del otro.
“Si hay química entre los dos el amor se dará, de lo contrario, no podrá mantenerse a la fuerza”, sostuvo Antonio Ruiz.