Palacio de la Policía Nacional | Foto: Kelvin de la Cruz
La Policía Nacional informó este lunes que rescató a nueve menores que eran prostituidas y recluidas en bares y otros locales, durante en un operativo realizado de forma simultánea en ocho provincias del país.
En las redadas, llevadas a cabo la noche del viernes, también fueron liberadas otras 136 mujeres adultas que se prostituían en esos establecimientos, según un comunicado de la Policía.
La operación se saldó con la detención de 14 personas, señaladas como los administradores de los locales de prostitución y que serán procesados por los delitos de proxenetismo y trata y tráfico de personas.
Un portavoz de la Policía dijo que no se trata de una única red criminal, sino de particulares que se dedicaban al proxenetismo por su cuenta.
Entre las mujeres y menores rescatadas figuran tres venezolanas y una haitiana, cuyas edades no fueron precisadas por la Policía.
Las menores, de entre 16 y 17 años aproximadamente, fueron rescatadas en locales de ocio situados en las provincias de San Cristóbal tres, en Azua cinco y en La Romana uno.
La operación contó con la presencia de 464 miembros de las Fuerzas Armada y de la Policía y es la de mayor envergadura realizada en 2019 en la lucha contra el proxenetismo y la explotación sexual de menores.
Los arrestos se desarrollaron de forma simultánea en la noche del viernes en las provincias de La Altagracia, Hato Mayor, La Romana, todas ellas en el este del país; San Cristóbal y Azua, en el suroeste; La Vega, Espaillat y Puerto Plata, en el norte.
Las menores de edad fueron entregadas al Consejo Nacional para la Niñez (Conani) y los detenidos fueron puestos bajo el control del Ministerio Público para los fines legales correspondientes.
En el operativo, las autoridades dominicanas contaron con la colaboración con el la Agencia de Servicios de Inmigración y Control de Aduanas de los Estados Unidos.
El Gobierno dominicano ha intensificado en los últimos años la lucha contra la trata de mujeres y de menores, en especiales en áreas turísticas, con un aumento de las operaciones policiales y el desarrollo de campañas de concienciación.
