Procuraduría General de la República | Foto: ProcuraduriaRD
La directora de Comunicaciones de la Procuraduría General de la República (PGR), Julieta Tejada, manifestó este jueves que las investigaciones del órgano persecutor arrojan evidencias de que la firma de la hoy occisa Juana Domínguez habría sido falsificada para poner en libertad a Jhoan Manuel Ramírez, acusado de matarla.
Tejada precisó que el Ministerio Público continúa las pesquisas del caso, ya que se determinó que el abogado del imputado trabaja para el mismo bufete que el jurista Alexis Chanel Aponte, quien cumple prisión preventiva por falsificar la firma de la fallecida Anibel González, también asesinada por su expareja, luego de llegar a un presunto acuerdo que aún está siendo investigado.
“Todos esos acuerdos se están investigando… en el marco de esa investigación resulta ser que encontramos otro acuerdo que resultó ser este. Hay evidencias, recuerden que el abogado que trabajó también como representante del anterior agresor, del feminicida de Anibel, está en estos momentos guardando prisión preventiva, precisamente por falsificación. Se determinó que la firma era falsificada”, respondió la funcionaria a los periodistas.
El Ministerio Público suspendió ayer miércoles a la directora de la Unidad de Violencia de Género de San Pedro de Macorís, Margarita Hernández Morales, quien además fue detenida con fines de investigar el convenio que permitió la libertad a Jhoan Manuel Ramírez.
Dijo que se está investigando para determinar si la presunta falsificación a la firma de Juana Domínguez fue ejecutada por la magistrada suspendida o por el abogado del alegado agresor.
Johan Manuel Ramírez es acusado de haberle provocado la muerte a su pareja Juana Domínguez Salas (Nona) por asfixia por sofocación, en un hecho ocurrido en horas de la madrugada del pasado lunes 4 de noviembre, en el sector Villa Hermosa de San Pedro de Macorís.
Entre 2017-2019, la PGR ha registrado 247 feminicidios, de los que más de cien se contabilizaron entre enero y septiembre del año en curso, de esos, 59 fueron clasificados como “íntimos”, es decir, perpetrados por sus parejas o exparejas.
