El expresidente uruguayo José "Pepe" Mujica (2010-2015) dijo hoy que con sus dos compañeros de cautiverio durante la dictadura militar, cuya historia narra una nueva película que llegará a los cines en los próximos días, les tocó "pelear con la locura", pero salieron victoriosos aferrados a la vida.
"Nos tocó pelear con la locura, porque más bien, en ese tipo de prisión, buscaron que quedáramos lelos. Y triunfamos: no quedamos lelos", señaló Mujica en una rueda de prensa en Buenos Aires para presentar "La noche de 12 años", del director uruguayo Álvaro Brechner.
El filme, coproducción de Uruguay, España y Argentina y que tuvo su estreno mundial este mes en el Festival de Venecia, narra el cautiverio entre 1973 y 1985 de José Mujica, Mauricio Rosencof y Eleuterio Fernández Huidobro, miembros del Movimiento de Liberación Nacional Tupamaros.
Es, en palabras de Brechner ("Kaplan", 2014), "una exploración hacia los límites" de la supervivencia y un relato sobre cómo, en circunstancias extremas, una persona no pierde la libertad de decidir cómo afrontar esas vicisitudes.
"Es cierto que es un pasaje doloroso, pero la libertad del individuo, dentro de su espíritu, de tomar sus decisiones acerca de qué tipo de hombre quiere ser permanece", sostuvo el realizador, que mantuvo largas conversaciones con los tres extupamaros para concebir su filme.
En calabozos estrechos, con escasa comida y una sola ocasión para ir al baño por día, "la realidad no era vivible" y los presos tuvieron que "empezar a construir, cada cual a su manera, los sueños, la fantasía, que era peligroso porque en la imaginación" podían quedar "empantanados", explicó Rosencof, encarnado en la cinta por el argentino Chino Darín.
"Yo no sé si somos de película o somos de biógrafo. Tal vez la conclusión más importante que tuvimos en el período que estuvimos en las catacumbas fue consultarnos los tres cuál era nuestro deber militante en esa condición y en ese lugar y se sintetiza en una sola palabra: resistir", dijo Rosencof, de 85 años.
Según Mujica, cada uno "resistió por los caminos que pudo" y, en su caso, cuando ya estaba "medio chiflando más de lo normal", los militares le dejaron empezar a leer y a escribir.
El exmandatario, de 83 años e interpretado en el filme por el actor español Antonio de la Torre, dijo en su cautiverio aprendió que no se necesitan muchas cosas para ser feliz sino los afectos y que de esa experiencia le quedó un gran amor a la vida.
"¡Qué hermosa que es la vida! Si tuviera que vivir otra vez, diría 'eche otra vuelta, pulpero'. A pesar de todos los pesares, nunca hay un triunfo definitivo y, por lo tanto, jamás hay una derrota definitiva", sostuvo.
Como dijo Rosencof, "no sólo de pan vive el hombre sino también de humor" y de poesía, y ello se deja ver también en los personajes de esta historia, también protagonizada por el actor uruguayo Alfonso Tort, quien da vida al fallecido político Eleuterio Fernández Huidobro.
"No pensé en nada, ni en películas ni nada por el estilo, ni menos que iba a ser presidente. Pensé muchas veces cómo me rajaba, cómo me iba del calabozo, y no pude. Me agarraron porque me faltó velocidad, no porque tenía sentido heroico. Si hubiera sido mejor atleta, no me agarran", comentó Mujica, riéndose de si mismo.
En perspectiva, el "Pepe" ve aquellos doce años como los que más "remodelaron" su "manera de pensar porque, si bien es cierto que hay mucho tiempo muerto, horas, días, años interminables, la necesidad de existir lo lleva a uno a pensar y repensar y hacerse preguntas que en la vida cotidiana difícilmente se hagan".
"Al fin y al cabo el único milagro que existe es el de haber nacido en esta vida. Por eso tengo una firme esperanza, pero no bucólica ni idiota, sino ligada al amor a la vida porque vale la pena vivirla al tope", sentenció Mujica.