Pavel Isa Contreras, economista I Foto: Kelvin De la Cruz
El economista Pavel Isa Contreras consideró que las autoridades monetarias pueden hacer muy poco ante el aumento acelerado de la tasa de cambio del dólar respecto al peso, pero opinó que cuentan con suficientes reservas para hacer frente a los deslizamientos.
Entrevistado vía telefónica en El Gobierno de la Tarde, el profesional de la economía opinó que las autoridades del Banco Central tienen una postura actualmente mucho más tolerante ante el alza de la divisa estadounidense, que estima ha sido más rápido y alcanza más del doble del ritmo esperado.
No obstante, estimó que éstas no tienen más que aceptar esa realidad, ya que la caída en la oferta ha sido muy fuerte, pero explicó que ante una escasez tan inesperada, es natural que se produzaca ese tipo de deslizamiento.
Afirmó, sin embargo, que la depreciación del peso no es tan explosiva, pero entiende que es más veloz y las autoridades han aceptado esta realidad.
Sostuvo que aún así las autoridades del Banco Central cuentan con suficientes reservas para enfrentar cualquier situación, pues han liberado hasta 500 millones de dólares por mes, pero expresó que si se entrega una buena cantidad de éstas han previsto que “podrían quedarse desarmados”.
“Y eso podría acelerar mucho más la depreciación, porque se va a advertir claramente que no tienen municiones para contenerla”, precisó.
Dijo que ahora mismo la gente tiene la percepción de que el Banco Central va a intervenir el mercado con una gran inyección de dólares y que quienes traten de ganar en este proceso terminarán perdiendo.
Calificó de correcta la actitud de las autoridades, de permitir un determinado nivel de deslizamiento, que ha sido inevitable, que es una forma de distribuir los costos entre los importadores y no solo entre los empleados.
Citó como un elemento que ha influido en la aceleración de la devaluación ha sido la “política monetaria laxa” de las autoridades con el aumento fuerte de la liquidez en la economía, con el objetivo de soltar un poco el lazo en el cuello de las empresas que están muy endeudadas y que los bancos puedan renegociar deudas, y así el crédito llegue más fácil a la gente.
Apreció que en los últimos días la presión devaluatoria ha cedido y la tasa de cambio se ha reducido algunos puntos.
Precisó que la escasez de divisas y el aumento de la liquidez en la economía se han combinado para la depreciación que se ha presentado.
Isa Contreras confió en que el ritmo explosivo devaluatorio no será tan acelerado como el de 2003 y 2004, y que muy pronto comenzará a ceder.
Previó que influido por los bajos precios internacionales del petróleo, las autoridades han podido mantener el control en la inflación.
