Las autoridades sanitarias panameñas reportaron este sábado 988 casos y 22 nuevas defunciones por la COVID-19, con lo que suman ya 36.983 los contagios confirmados y 720 las muertes por la pandemia, que se encuentra en su fase 4, la más avanzada de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Hay 979 pacientes hospitalizados, 154 en unidades de cuidados intensivos (UCI) y 825 en sala general, mientras que 17.523 se encuentran en aislamiento domiciliario, de ellas 645 en hoteles-hospital.
El Ministerio de Salud (Minsa) dijo en un comunicado de que "se aplicaron 3.202 pruebas" de detección de la COVID-19 "para un porcentaje de positividad de 31 %".
Panamá vive desde hace más de un mes una escalada de casos, lo que frenó el proceso de reapertura de la economía de país, uno de los más golpeados de la región por la pandemia del nuevo coronavirus SARS-CoV-2.
El Consejo Consultivo Presidencial de Salud indicó que la pandemia "en Panamá está en la fase 4, la más avanzada de la según la OMS, que es transmisión comunitaria a un alto nivel".
Esta situación está focalizada en el área metropolitana, Panamá Este , Panamá Oeste y San Miguelito y en algunas provincias, donde "hay un aumento significativo de los casos a casi el triple y un aumento en la mortalidad importante, con una amenaza del desborde de un sistema de salud que ya estaba frágil en su red sanitaria en particular en los hospitales y su atención primaria".
El Ministerio de Salud reiteró este sábado que la estrategia para enfrentar esta crisis incluye centros de trazabilidad en todo el país, y sumar a las autoridades locales y a las organizaciones comunales para que la población tenga una participación que ayude a que las acciones contra la propagación de la enfermedad sean más efectivas.
La provincia de Panamá, donde está la capital, y la aledaña de Panamá Oeste, son las que registran la más alta incidencia de la COVID-19, y por ello son las únicas con fuertes restricciones a la movilidad, mientras que en el resto del país rige solo un toque de queda nocturno.
Panamá continúa con una lenta reactivación de actividades económicas, aunque el comercio no esencial, restaurantes, hoteles, la educación y los eventos culturales y deportivos siguen cerrados.