Las muertes por sobredosis de drogas (alcohol incluido) alcanzaron en 2021 la cifra de 2.668 en la ciudad de Nueva York, lo que supone la más alta desde que hay registros en esta urbe y presentan un alarmante aumento de 500 casos más con respecto al año anterior.
Las cifras -que presentó ayer el Departamento de Salud de la Alcaldía, y que hoy recogen los medios- muestran que el fentanilo (un potente opioide sintético) sigue siendo la droga más común entre los casos de sobredosis, pues se presenta en un 80 % de las muertes, una tendencia que se observa por quinto año consecutivo.
Entre los fallecidos también se encontró cocaína en un 47 % de los casos y alcohol en un 39 %, lo que demuestra que los adictos consumen varias sustancias simultáneamente.
En todo Estados Unidos, las muertes por sobredosis sumaron 108.000 casos en el mismo 2021.
Las cifras de muertes no están repartidas de manera "igualitaria", y se observan importantes sesgos: la población de raza negra estuvo claramente sobrerrepresentada, pues supuso el 39,8 % de esas muertes; además, el condado del Bronx (donde se concentra la población negra) también tiene la tasa más alta de muertos por 100.000 habitantes, por encima de otros condados de la ciudad.
Nueva York tiene el único "centro de prevención de sobredosis" -también llamado "de inyección controlada"- del país, abierto en noviembre de 2021, y aunque sus responsables aseguran que han logrado evitar 670 muertes, hay importantes resistencias a nivel político para generalizar su apertura en la ciudad y en todo el país.