Kelvin de la Cruz
El comunicador Ricardo Nieves consideró este viernes que la estación radial Z 101 debe ser preservada como un patrimonio de la República Dominicana, pues ha sembrado una confianza y responsabilidad que ya no tiene vuelta atrás.
Precisó que la Z 101 hay que preservarla porque hay libertad, y no ordena lo que se debe o no decir, y las presiones del poder se han sorteado de manera muy inteligente y democrática.
“Esta estación no es mejor ni peor que otra. Esta estación no deja de ser una empresa igual que otra, procura la renta y la ganancia como toda lógica económica del capitalismo. Esto lo estoy diciendo no con ánimo de alabanza ni de tumbarle polvo a nadie", sostuvo.
Dijo que respeta y respetará las opiniones diferentes, las ideas contrarias, pero que lo que nunca va a respetar es la ignominia de vender los juicios y las opiniones, y mucho menos a favor de un poder corrompido como el que existe en la República Dominicana.
El comunicador afirmó que ni el Gobierno ni el procurador general de la República, ni CDN lo va a desviar de los propósitos simples y llanos que como ser humano y comunicador posee.
El catedrático habló en esos términos al referirse a su renuncia, junto a las comunicadoras Edith Febles y Altagracia Salazar, del matutino "Enfoque Matinal", que se transmite por CDN.
“Soy un comunicador que me empleo en esto y digo las cosas con el corazón. Yo no estoy aquí haciendo una simulación, honestamente que no, por eso este ejercicio uno lo vive, lo goza y lo sufre mucho también, pues vienen muchos episodios de dramas que golpean a uno y en el país suceden demasiadas cosas negativas”, comentó.
En ese sentido, el también médico acotó que en el país hay demasiado abuso y atropello de poder, tanto de manera subjetiva como objetivamente.
Afirmó que lo que ha acontecido no cayó porque sí; todos saben que ocurrió, al tiempo de destacar que fue un acto de poder.
Dijo que cuando se contrapesa la libertad de empresa y de prensa no hay que decir quién gana: “Nosotros aceptamos esas reglas y asistimos al ejercicio de la comunicación bajo esos lineamientos, porque así es el capitalismo y así está diseñada la sociedad”.
Sin embargo, Nieves puntualizó que hay un marco que nadie puede disponer y un límite que nadie puede pasar que es en la consciencia de los que comunican, debido a que es un ejercicio general.
“Nadie puede decirle a mi consciencia que permita el robo y la simulación de justicia en un país como este, barrido institucionalmente, donde el poder político ha hecho lo que quiere y se ha pasado las instituciones por donde le da la gana, ¿y que yo tenga que aplaudir eso en un medio?, eso no marcha bien y no es verdad que va a ocurrir”, argumentó el comunicador.
“No me echo para atrás. No transo las cuestiones que considero de principios. No vendo mi consciencia en términos sencillos, no la alquilo por ningún precio, bajo ninguna condición!”, afirmó Nieves.
“Nosotros los que estamos aquí sentados en esta emisora hemos decidido no callar, aunque tengamos diferencias, hemos decido que las cosas que afectan a nuestro país y nuestra comunidad, no las vamos a soterrar ni las vamos a apañar”, expuso.
El comentarista del Gobierno de la Tarde sustentó que el nuevo modelo de la comunicación es una matriz global que se llama red, y que ese sistema no está bajo el control de los dueños de los medios de comunicación y que cada vez tendrán menos control, con la salvedad incluso, de los medios escritos tradicionales que tienen la tendencia muy seria a desaparecer o disminuir considerablemente. "Es verdad que aquí ha ido más lento y que en los países pobres es mucho más medroso y más dilatado, pero eso es imparable".
“El mundo camina hacia la inmaterialidad, hacia la virtualidad y hacia la red, y todos tendrán que adaptarse a ello. Hoy se puede abusar en un país pobre como República Dominicana de esa condición, pero el futuro no le aguarda por mucho tiempo. Eso es bueno que lo sepan”, precisó Nieves.
Añadió que el otro elemento, es que cada vez el poder será más escrutado y más criticado, porque cada vez más la ciudadanía se incorpora, piensa más, tiene más información y surge una nueva generación de personas que son totalmente diferentes a las del pasado.
