Entre 3.000 y 4.000 presos que cumplen cadena perpetua en California por haber cometido al menos tres delitos, podrían lograr la libertad condicional tras un fallo judicial emitido en septiembre, informaron este viernes fuentes del Departamento de Prisiones del Estado.
El pasado mes, la jueza Laura Laesecke del Segundo Distrito de la Corte de Apelaciones de California en Los Ángeles, determinó que aquellos reos reincidentes cuya última condena haya sido por un delito no violento están amparados por un cambio legislativo aprobado en referéndum en 2016.
Ese cambio, conocido como Proposición 57 y que logró el apoyo del 64 % de los electores, enmendó la Constitución estatal para incrementar las opciones de libertad condicional y beneficios por buen comportamiento para los presos no violentos, y aliviar así el saturado sistema penitenciario californiano.
El Gobierno estatal había dejado en un primer momento a los criminales reincidentes fuera de este supuesto, pero el fallo judicial le obliga a incluirlos y, por tanto, a que puedan ser considerados para la libertad condicional.
"Estamos en el proceso de generar reglamentos de emergencia conforme a la decisión de la Corte de Apelaciones", indicó a Efe la portavoz del Departamento de Correcciones y Rehabilitación de California (CDCR) Vicky Waters.
Según Waters, esta documentación se presentará ante la Oficina de Leyes Administrativas estatal antes del próximo 5 de enero, fecha límite para ello.
La Junta de Audiencias de Libertad Condicional estima que hay entre 3.000 y 4.000 presos que podrían beneficiarse de la decisión judicial.
"Sin embargo, cada reo será evaluado individualmente", apuntó la portavoz, quien aseguró que la decisión de conceder o no la libertad condicional no se aplicará de forma automática, sino con base en las particularidades de cada caso.
Los potenciales beneficiarios de la resolución judicial son presos afectados por una ley aprobada en California en 1994 y conocida como "Three Strikes", en referencia a los tres fallos que llevan a la eliminación del bateador en el béisbol.
De acuerdo con la legislación, aquellos criminales que reincidan por tercera vez después de que por lo menos uno de los dos delitos anteriores fuese considerado grave son condenados a penas de un mínimo de 25 años de prisión o cadena perpetua.