Cerca de 1.680 cervezas competirán por alzarse con el distintivo de ser la mejor del continente la próxima semana en Santiago en la séptima edición del certamen la Copa Cervezas de América, que reunirá este año a unos 390 productores de 18 países.
Con el objetivo de "crear más cultura cervecera y promover el consumo responsable de alcohol" en Chile y en la región, el concurso pondrá frente a frente las recetas de los participantes, que serán evaluadas en un formato de cata a ciegas por expertos internacionales de renombre.
Las pruebas, que tendrán lugar entre los días 8 y 13 de octubre, analizarán "el sabor, el aroma y la sensación en boca" de las producciones artesanales, que pugnarán por lograr las medallas de oro, plata y bronce que certifiquen y reconozcan su calidad.
El presidente y cofundador del certamen, Daniel Trivelli, indicó que este no es solo un evento diseñado para otorgar distinciones sino que también sirve como "una plataforma intercultural para compartir experiencias sobre el mundo de la cerveza artesanal".
"Es importante sumar a la comunidad, porque ahora saber valorar una buena cerveza se ha convertido en una tendencia en nuestro país. Por eso, tendremos la Semana Cervecera de Santiago, la cual estará abierta a ese público que busca conocer más sobre un rubro que ya forma parte de nuestra identidad nacional", concluyó Trivelli.
Entre las distinciones estarán este año el premio a la mejor cerveza y cervecería americana, así como por países y la mejor cerveza por categoría, que recibirán una certificación de calidad que resalte sus productos en el mercado.
Además, como novedad en esta séptima edición, la competición contará con tours, talleres, maridajes, visitas a cervecerías y bares especializados de la región Metropolitana y la región de Valparaíso.
Una oferta que se suma al programa de conferencias con cerveceros latinoamericanos, que permitirán intercambiar conocimientos y metodologías de trabajo entre los distintos productores.
Y habrá un espacio pensado para los proveedores, para fomentar la interacción entre ellos y fomentar la creación de redes de negocios en la industria cervecera de la región.
Según los datos manejados por los organizadores, anualmente se producen en Chile cerca de 700 millones de litros de cerveza, y se estima que el consumo per cápita en el país aumentó en la última década de 25 a 46 litros.
Una evolución en el consumo que ha ido acompañada de un mayor peso de las producciones artesanales, un gusto transversal que no comprende de edades y que se apoya en las más de 300 cervecerías de esta índole a nivel nacional que representan ya el 1,7 % del mercado total en el país austral.