El presidente venezolano, Nicolás Maduro, rechazó ayer domingo una eventual suspensión de las elecciones legislativas del próximo 6 de diciembre, a las que el grueso de la oposición no se presentará, al tiempo que denunció las presuntas "maniobras de algunos sectores" para postergar estos comicios.
"Que nadie nos venga a hablar de suspender elecciones, nadie en el mundo, oído ¿Así o más claro? En Venezuela estamos obligados por la Constitución, llueva, truene o relampaguee, a hacer elecciones el 6 de diciembre, a hacer elecciones este año", dijo Maduro durante una jornada de trabajo transmitida por la televisión pública VTV.
"Con pandemia o sin pandemia habrá elecciones en Venezuela, así de sencillo", insistió el mandatario sudamericano.
El miércoles pasado, el dirigente opositor Henrique Capriles dijo que no era posible realizar las legislativas en medio de la crisis sanitaria que ha provocado la pandemia por el nuevo coronavirus en Venezuela, donde más de 53.000 personas se han contagiado de la COVID-19.
Y esta misma jornada, Capriles, que se desmarcó de la estrategia opositora de boicotear los comicios, insistió en que "no podría haber un proceso electoral mientras los venezolanos mueren" por la COVID-19.
"OBLIGADOS A ELEGIR"
Pero Maduro señaló hoy que ya otros países han celebrado elecciones en medio de difíciles situaciones provocadas por la pandemia, al tiempo que usó como ejemplo las presidenciales estadounidenses del venidero 3 de noviembre.
"En Estados Unidos, a pesar de que tienen 60.000 casos diarios, nadie propone (suspender elecciones) porque están obligados a elegir al presidente", dijo.
En ese sentido, el mandatario venezolano consideró que Venezuela llegará al 6 de diciembre "en mucha mejor situación" de la que presenta ahora, cuando promedia los 1.000 nuevos casos cada día.
"Las elecciones del 6 de diciembre van, porque hay maniobras en el mundo, y hay maniobras de algunos sectores, para sabotear las elecciones", insistió.
OPOSICIÓN DENUNCIA FALTA DE CONDICIONES
La oposición venezolana que se agrupa bajo la figura del líder Juan Guaidó, a quien medio centenar de países reconoce como presidente encargado, ha dicho que no irá a los comicios, que tacha como una farsa, al denunciar que no existen condiciones para una competencia justa.
Entre las causas de los opositores para rechazar el llamado a las urnas está el nombramiento del Consejo Nacional Electoral (CNE) por parte del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) y no del Parlamento, que es quien debe hacerlo de acuerdo a la Constitución.
El TSJ, una entidad cuya legitimidad es negada por la oposición por el proceso de nombramiento exprés de sus magistrados, con abiertas simpatías por el chavismo, designó a los rectores del CNE al considerar que la Asamblea Nacional (AN, Parlamento) había hecho omisión de sus funciones.
Al frente del ente electoral puso a Indira Alfonzo, una mujer que fue sancionada el pasado viernes por Estados Unidos, y en mayo de 2018 por el Gobierno de Canadá.
El sábado, Guaidó hizo pública una carta que envió al Alto Representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, el español Josep Borrell, en la que remarcó las "inaceptables condiciones" de las próximas legislativas.
"El acto convocado por la dictadura de Nicolás Maduro para el próximo 6 de diciembre del presente año no reúne las más mínimas condiciones para que las mismas sean libres e incluyentes, razón por la cual hemos rechazado esa farsa", dijo Guaidó en ese comunicado.