El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, pidió ayer domingo, en un acto de conmemoración por el décimo aniversario de la muerte de Hugo Chávez (1999-2013), mantener la unión política, ideológica, moral y alejar cualquier "fuerza divisionista".
"Siempre surgen fuerzas disolventes (…) que pretenden desdibujar el camino de la resistencia de la revolución, que pretenden aprovecharse de las dificultades (…) el pueblo les tiene que decir muy claramente, no a las fuerzas disolventes (…) y cuidar la unión política, la unión ideológica, la unión espiritual, la unión moral de nuestro pueblo", señaló Maduro.
Asimismo, dijo que a pesar del fallecimiento de Chávez, no ha "habido ausencia, ha habido presencia permanente de su ideal, de su empuje revolucionario y del compromiso jurado de avanzar en la construcción de la patria libre, independiente, soberana, socialista".
"Quién sabe de dificultades, nuestro pueblo, las amenazas, las agresiones, las sanciones criminales, y creyeron, el imperio estadounidense, que podía imponer su modelo colonial contra nuestro país, pero nosotros hemos dicho muy claramente, modelo colonial no, patria libre sí (…) por ahí vamos perfilando el camino de los años por venir", añadió.
El oficialismo rindió más temprano otro homenaje a Hugo Chávez en el cuartel desde el que dirigió el golpe de Estado de 1992 contra el entonces presidente, Carlos Andrés Pérez.
En el Cuartel de la Montaña, antiguo museo militar rebautizado como Cuatro de Febrero en honor a la fecha de 1992 en la que, desde sus instalaciones, Chávez dirigió el golpe de Estado, miembros del Gobierno y simpatizantes del hombre que rigió los destinos de Venezuela hasta 2013 recordaron su legado.
En ambos homenajes estuvieron presentes los presidentes y expresidentes de la región invitados Luis Arce, Daniel Ortega, Rafael Correa, Manuel Zelaya, Evo Morales y Raúl Castro.
Asimismo, miles de simpatizantes del chavismo acudieron al Cuartel de la Montaña para honrar la memoria del mandatario.
Chávez falleció el 5 de marzo de 2013 a los 58 años víctima de un cáncer y es considerado una de las figuras más trascendentes y controvertidas del inicio de siglo en América Latina.