Jefe de Estado de Venezuela, Nicolás Maduro | Foto: EFE/Cristian Hernández
El gobernante venezolano, Nicolás Maduro, llamó este miércoles a realizar el sábado una jornada mundial de protesta en contra del bloqueo total de bienes estatales venezolanos en Estados Unidos decretado por la Administración de Donald Trump.
"Me sumo a la convocatoria y la hago mía a una gran jornada mundial de protesta contra el bloqueo de Donald Trump el próximo sábado 10 de agosto", dijo el mandatario en Caracas durante un acto conmemorativo de los 200 años de la batalla que selló la independencia de Colombia.
Maduro llamó a manifestaciones en todas las ciudades de Venezuela y del mundo, incluso a expresar el rechazo al bloqueo a través de las redes sociales.
"Los pueblos del mundo protestan contra Donald Trump, no más Trump (…) Ya basta de bloqueo y de agresión a Venezuela, saca tus manos de Venezuela, Donald Trump", sostuvo.
El líder chavista extendió este llamamiento a "mil formas de protesta en las calles" a todas las instituciones públicas del país caribeño, incluida la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB).
Además, consideró la sanción estadounidense como una insensatez y un "despropósito total" que, argumentó, evidencia los "niveles de odio e intolerancia del supremacismo imperialista".
A su juicio, la Administración Trump "pretende amenazar, agredir y dañar a Venezuela" pero, advirtió, la llamada revolución bolivariana, en el poder desde 1999, se ha "preparado para esta batalla".
"Tengan la seguridad (…) esta batalla también la vamos a ganar. Venezuela saldrá airosa", dijo al reiterar su llamado a la "unión nacional" con empresarios, trabajadores y estudiantes.
El pasado lunes, Trump impuso un bloqueo total a los bienes estatales del Gobierno de Venezuela en territorio estadounidense, en un nuevo paso en el intento de deponer a Maduro como mandatario a quien que califica de "dictador".
La medida ha sido calificada por el Ejecutivo de Maduro como una "una nueva y grave agresión" de "terrorismo económico" y ha dicho que afectarán la compra de alimentos y medicinas para el país, aunque EE.UU. ha asegurado lo contrario.
