Personas con insuficiencia renal que reciben hemodiálisis son más propensas a infectarse de hepatitis tipo C debido a que reciben más transfusiones de sangre y a que están expuestas a un área altamente contaminada, afirmó una especialista en México.
La especialista en nefrología, la mexicana Silvia Palomo habló de los factores de riesgo en este tipo de pacientes previo a su participación en el segundo Foro de Hepatitis C, que concluye este viernes en la ciudad de Guadalajara, capital del estado de Jalisco, en el oeste de México.
"Muchos pacientes infectados que están iniciando la diálisis, otro tanto se infecta durante el transcurso de la diálisis, la mayoría con virus C", explicó Palomo en entrevista con Efe.
La especialista explicó que "se van contaminando conforme van acudiendo a sus sesiones, no tiene que ver con la hemodiálisis, sino con los factores de riesgo que el paciente tiene".
Palomo es una de las ponentes del foro organizado por la Asociación Mexicana de Hospitales y la Secretaría de Salud de Jalisco que lleva como tema "Mejorando la trazabilidad de la atención: El camino hacia la eliminación de la Hepatitis Crónica tipo C en México" con la presencia de un centenar de médicos especialistas de instituciones públicas y privadas.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que en el mundo hay 71,1 millones de personas con infección crónica por el virus de la Hepatitis C, de ellos un número considerable de esas personas desarrollará cirrosis o cáncer de hígado.
En México se estima que hay entre 400.000 y 600.000 mexicanos quienes están infectados por este tipo de virus, que de no ser diagnosticado y tratado a tiempo, puede ocasionar padecimientos graves como cirrosis hepática y cáncer de hígado, los cuales podrían causar la muerte.
La nefróloga, coordinadora del Programa para la Formación de Investigadores del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), afirmó que contraer esta infección coloca a los enfermos del riñón en un grave peligro pues agrava su condición de salud "no solo con alteraciones hepáticas sino también con otras complicaciones".
"Tienen mayores posibilidades de tener infecciones sistemáticas graves de otro tipo, se enferman muchísimo más del corazón, tienen una mortalidad doblemente incrementada si los comparas con los que no lo tienen, les provoca una inflamación en todo su cuerpo de manera muy importante, además de que afecta su hígado de manera muy severa", detalló.
Palomo encabeza un programa de microeliminación de la hepatitis C en los pacientes del IMSS con la intención de diagnosticarlos y tratarlos a tiempo para evitar que tengan mayores complicaciones.
"De aproximadamente 7.000 pacientes atendidos contabilizamos entre 70 y 85 pacientes infectados, llegamos a ellos haciendo una detección de manera masiva y de esta forma logramos identificar a las personas que son reactivas a la presencia del virus, se hace un protocolo de confirmación y aquellos casos que son positivos los enviamos a tratamiento", indicó.
Palomo afirmó que han podido curar esta enfermedad mediante un tratamiento a base del medicamento llamado Mavyret, un fármaco "altamente eficaz" al que responden 99 % de los enfermos renales, y que también puede ser utilizado en personas que no tengan problemas del riñón.
La especialista recomendó a la población general a realizarse pruebas de detección rápida mediante sangre para saber si tienen esta enfermedad, en especial a aquellas que tienen factores de riesgo como transfusiones de sangre o sus derivados recibidos antes de 1994, usar drogas inyectadas, haberse realizado perforaciones en el cuerpo o tatuajes, o haber tenido una punción accidental con agujas contaminadas o recibir hemodiálisis.