La senadora Elizabeth Warren fue ayer martes el principal blanco de los ataques en el cuarto debate demócrata, cuyos participantes mostraron unidad en cuanto a la investigación previa a un juicio político a Trump y evitaron cuestionar la actuación del exvicepresidente Joe Biden en lo relativo a Ucrania.
Las críticas y desafíos que varios de los aspirantes demócratas dirigieron a Warren durante el debate que se celebra en Westerville (Ohio, EE.UU.) dejaron entrever que algunos ven cada vez más a la senadora, y no tanto a Biden, como la favorita en la contienda de las primarias demócratas para las elecciones de 2020 en EE.UU.
Warren recibió críticas del alcalde Pete Buttigieg y la senadora Amy Klobuchar sobre su plan para impulsar un sistema de sanidad pública en Estados Unidos, así como de ésta última y el excongresista Beto O’Rourke respecto a su intención de imponer un impuesto a la riqueza de los más adinerados en el país.
"A veces creo que la senadora Warren está más centrada en ser punitiva contra una parte del país, en lugar de asegurarse de que podemos ayudar a la gente" en general, dijo O’Rourke.
Warren respondió, desconcertada: "Me deja de piedra la idea de que alguien piense que soy punitiva".
La senadora por Massachusetts ha subido en las últimas semanas en encuestas en estados clave y se ha situado por delante de Biden en algunos sondeos nacionales, por lo que varios de los aspirantes del espectro moderado del partido, que no se han atrevido a criticar demasiado al exvicepresidente, decidieron probar suerte con ella.
El de Ohio fue también el primer debate desde que la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, anunciara a finales de septiembre la apertura de una investigación previa a un juicio político contra el presidente estadounidense, Donald Trump.
Aunque la base de ese juicio político tiene que ver con las presiones de Trump a los líderes de Ucrania para que investigaran a Biden, los aspirantes demócratas esquivaron cualquier debate sobre la posibilidad de que el exvicepresidente cometiera negligencias relacionadas con los intereses ucranianos de su hijo Hunter.
"Mi hijo no hizo nada mal, yo no hice nada mal. (Cuando era vicepresidente) Llevé a cabo la política del Gobierno estadounidense, la de combatir la corrupción en Ucrania", subrayó Biden.
El resto de aspirantes centraron sus palabras en defender la necesidad de juicio político contra Trump, y el senador Cory Booker incluso criticó a los moderadores por preguntarle al "estadista" Biden sobre el tema.
"Eso ha sido ofensivo (…). La única persona que ha disfrutado de eso al verlo desde casa ha sido Donald Trump", opinó Booker.
Los aspirantes también condenaron la decisión de Trump de retirar las tropas estadounidenses del norte de Siria justo antes de la ofensiva turca contra los turcos, y el senador Bernie Sanders llegó al punto de declarar que Turquía ya "no es un aliado de Estados Unidos" porque está cometiendo un "asesinato masivo".