Agencia DPA
Nuevo reloj y nueva marca: los futuros smartwatch de Samsung ya no se llaman Gear sino Galaxy Watch y saldrán a la venta el 7 de septiembre.
Podrán adquirirse con un diámetro de 42 y 46 milímetros y llevarán el sistema operativo propio de la empresa surcoreana, Tizen. Además, puede elegirse entre la versión solo bluetooth o LTE, con una tarjeta eSIM integrada.
Los precios van desde los 309 euros para la versión bluetooth del reloj de 42 milímetros (330 dólares), en tanto que el LTE del de 46 milímetros costará 399 euros (450 dólares).
A nivel de diseño, el Galaxy Watch se asemeja mucho a los relojes clásicos de pulsera. Samsung anuncia que la pantalla tiene un efecto de profundidad que hace que las agujas y otros instrumentos se vean realistas.
Los usuarios pueden elegir entre correas de 22 y 20 milímetros. La pantalla redonda tiene según el modelo un diámetro de 3,05 o 3,3 centímetros.
Viene con funciones típicas para hacer deporte y de salud, como un pulsómetro, barómetro, hasta 39 programas de entrenamiento y otros de relajación. También permite enviar mensajes, responder llamadas o tener listas musicales. Para los nadadores es interesante que el Galaxy Watch es sumergible y cuenta con un modo de deportes acuáticos que bloquea la pantalla y expulsa el agua que entra en los altavoces.
Respecto de la duración de la batería, Samsung es realmente optimista y habla de hasta siete días para el reloj más grande y cinco para el pequeño… aunque si no se los usa. Más realistas parecen las estimaciones para entrenamiento y uso del GPS, que son de 24 y 14 horas. Samsung afirma que con un uso normal debería durar dos días.
