El expresidente de la República Dominicana doctor Leonel Fernández advirtió que si el país permite que todo que el que nazca en su territorio sea dominicano, con el tiempo la identidad nacional se perderá por un factor demográfico.
"Cuando nosotros planteamos el derecho de la nacionalidad, no es una ideología racista, ni xenofóbica, ni excluyente; lo que estamos planteando es la supervivencia de la nación y de la identidad de la República Dominicana", indicó durante un conversatorio que sostuvo con el senador por la provincia Espaillat, José Rafael Vargas, con el que presentó su libro Años de avances. Escritos de Teoría y Acción en el marco de la Feria del Libro de Miami.
El exmandatario explicó que en Estados Unidos se introdujo el jus soli a través de una enmienda constitucional después de la guerra civil en la que se abolió la esclavitud, a los fines de garantizar el derecho de los antiguos esclavos.
Sostuvo que a diferencia de Estados Unidos, en la República Dominicana no existe el jus soli absoluto e incondicional, sino que ese mecanismo solo es válido para los hijos de los extranjeros que residen legalmente en el país.
En cuanto a Haití, dijo que la constitución de ese país establece que toda persona nacida de padres haitianos es haitiana.
A propósito de Haití, Fernández afirmó que la comunidad internacional debe involucrarse en el resurgimiento económico y el desarrollo de Haití.
Al abordar lo concerniente a la situación económica haitiana, el ex gobernante dominicano recordó que el país caribeño tuvo que pagar un alto precio por haber desafiado al poder colonial esclavista, al declarar su independencia en 1804, tras una guerra prolongada y devastadora.
Sostuvo que a ese hecho, la comunidad internacional reaccionó aislando a Haití durante varias décadas para que su hazaña no le sirviera de estímulo a otros países donde existía la esclavitud.
"Yo pienso que Haití tuvo que pagar un precio muy alto por haber tenido el atrevimiento de abolir la esclavitud", declaró Fernández.
Indicó que, contrario a la República Dominicana, que en los últimos 60 años ha tenido la economía de mayor crecimiento promedio de la región, en Haití ha habido una inestabilidad política crónica que lo ha sumido en la miseria y la desesperanza.
Al abordar el tema de la migración desproporcionada de haitianos hacia la República Dominicana, el exmandatario dijo que la situación no se resuelve repatriando ni construyendo un muro en la frontera, sino auspiciando el desarrollo económico de Haití.
"La República Dominicana tiene que ser una abanderada de que Haití se desarrolle y alcance la prosperidad", sostuvo.
Indicó que tras el terremoto que devastó a Haití el 12 de enero de 2010, la República Dominicana le construyó a ese país una universidad, en el entendido de que la educación es la base del desarrollo y la prosperidad.
El expresidente Fernández se encuentra agotando una agenda de trabajo en los Estados Unidos que lo llevó primero a Miami, en el estado de Florida, ciudad en la que puso en circulación su libro. Igualmente, el intelectual y político conoció las instalaciones y trayectoria del moderno tren de Miami Brigthtline, en el que viajó hasta Fort Lauderdale, para luego dirigirse a Lynn University, donde sostuvo una reunión de trabajo con su presidente.
Tras agotar su agenda en Florida, Fernandez irá a Washington DC, donde tiene previsto presentar ante el Consejo Permanente de la Organización de Estados Americanos (OEA) el informe final correspondiente a las elecciones celebradas recientemente en México. Se recuerda que Fernández fungió como jefe de la Misión de Observadores de la OEA en ese proceso electoral.